¿Por qué se pretende prohibir la champeta en Cartagena?

En diálogo con BLU Al Derecho el doctor Eduardo Varela Pezzano, socio de la firma Cavelier Abogados, analizó jurídicamente el proyecto de acuerdo distrital que tramita el Concejo de Cartagena que busca regular los bailes eróticos de los menores de edad en esa ciudad (Lea también: “Menores no bailan champeta; adoptan posiciones sexuales”: concejal de Cartagena). La exposición de motivos del proyecto es que bailes como la champeta, que en Cartagena se conocen popularmente como ‘el baile plebe’, estarían incitando a los embarazos de los niños a una temprana edad y por eso, dice el proyecto, tienen que regularse. El problema, dice Varela, “es que el proyecto señala que son los adultos los que no pueden salir a bailar de forma plebe a la calle ni a los parques porque, dice el proyecto, son sitios donde podrían estar presentes los menores de edad”. El problema, dice Varela, es que el proyecto se constituye en dos artículos importantes, señala, “el primero señala que son los adultos los que no pueden salir a bailar de forma plebe a la calle ni a los parques porque, dice el proyecto, son sitios donde podrían estar presentes los menores de edad”. “Una cosa es regular los bailes eróticos de los niños y otra muy distinta regular los de los adultos. Esto sin duda afecta a la champeta, al reguetón y al choque, porque son los ritmos que, precisamente, mueven el ‘baile plebe’ entre los barrios populares de Cartagena”, añade. El segundo artículo obliga a instituciones educativas de carácter oficial o privado a propender porque en las jornadas culturales los menores no practiquen bailes que incidan en el contacto físico de tipo sexual o que hagan apología al sexo o a posiciones sexuales de ningún tipo. El concejal de Cartagena por el partido Cambio Radical Antonio Salim Torres, busca que se apruebe un proyecto de su autoría con el que quedaría prohibido que los menores de edad bailen champeta y reggaetón haciendo poses sexuales. Sobre las críticas que ha recibido, teniendo en cuenta que es un género musical tradicional de la Costa Caribe, el concejal Salim ha asegurado que “no se está atentando en contra de nuestro folclor, pero en los últimos tiempos menores de edad vienen realizando este tipo de bailes adquiriendo posiciones sexuales, lo que está despertando, según estudios psicológicos, el despertar temprano de las relaciones sexuales”.