Para Hamilton Barreto, presidente del sindicato de Electricaribe, el Gobierno tiene que reconocer primero que fracasó con la política de privatización en las empresas del sector eléctrico.
Advierte el temor de que los 7 millones de usuarios del servicio en la región Caribe tengan que asumir los 1.600 millones de dólares que pide gas natural Fenosa.
“La organización sindical desde mucho antes de la intervención siempre vimos como muy apresurada una medida como la intervención. También tiene que reconocer que fue un error entregar la generación y aquí tenemos los resultados”, dijo Barreto, quien cuestiona que los recursos van a salir del bolsillo de los colombianos y principalmente de los costeños pues “esto se va a ver reflejado en tarifas”.
En cuanto a la prestación del servicio insiste en que con la intervención nada ha mejorado: “Ha continuado de mal en peor el servicio. El flujo de caja no da y cada día el estado de las redes es peor”.
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Finalmente anunció que se realizará un foro en la sede sindical para analizar de fondo cómo van a quedar las tarifas en la costa atlántica.
“El clamor es que no salga peor el remedio que el mal y no quedemos con un servicio de energía totalmente alto en la costa atlántica”, concluyó.
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