Santiago de Chile: transición de Transantiago a un sistema con buses 100% eléctricos

El modelo de transporte público de Chile es muy parecido al de Bogotá, con la excepción de que en esa ciudad hay un sistema de Metro que es la arteria principal de la movilidad. Sin embargo, durante los últimos años los buses que circulan por troncales independientes tal cual lo hace TransMilenio en Bogotá, y que sirven para interconectar el metro subterráneo con algunas franjas sobre la superficie, han tenido problemas, no solo por la contaminación, sino porque algunos se han averiado por fallas mecánicas provocando accidentes.Por esa razón, el Gobierno Nacional decidió establecer una meta de política pública para que Chile, no solo Santiago, se convierta en el segundo país con más buses eléctricos, cero contaminación, luego de China en donde se calcula que hay más de 350.000 operando.Alex Troncoso es un periodista que cubre temas de medio ambiente para varios medios de comunicación en Santiago y dijo que la empresa con capitales colombianos dueña de la gran mayoría de buses de Transantiago fue la peor calificada por su bajo desempeño en el sector. Explicó también que este año se calcula que lleguen más de 100 buses chinos 100% eléctricos y que el próximo año sean miles circulando en las calles.“Actualmente el sistema de transporte público metropolitano se conecta con la red de metro. Y se conecta con el servicio de metrotren que une a las periferias de la ciudad. Son cerca de 6.300 buses que circulan por la región metropolitana. Es una flota nueva que comenzó a circular durante 2017 a partir de buses diesel con siete concesionarios privados y se dividen por zonas y sectores. Pero ese sistema ha ido mutando y se plantea hacer la transición para el próximo año. Ahora solamente existen los buses troncales que hacen recorridos bastante largos uniendo a las periferias con el centro de Santiago y con el metro”.Troncoso explicó que hubo problemas durante los recientes días por la contaminación del aire. “Se dijo en su momento que estos buses iban a contaminar menos, situación que no se ha visto reflejada por lo que se tuvo que cambiar la normatividad sobre material contaminante y ahora hay muchas más restricciones. Pero de todas maneras actualmente estos buses se encuentran en pésimas condiciones y esos son los reclamos principales de las personas. Hubo varios accidentes de buses que se queman, o se averían. Hace poco hubo un paro de uno de las operadoras porque los trabajadores se quejaron de malas condiciones por la falta de descanso”, agrega.Debido a todos estos problemas el presidente Sebastián Piñera le prometió a los ciudadanos el inicio de una transición hacia los buses eléctricos, que está por iniciar.“Las autoridades de transporte viajaron a China de donde van a ser transportados estos buses que van a llegar a Santiago. Cuando se implementó el Transantiago, hace algunos años, se señaló que iba a ser un sistema novedoso que iba a traer muchos beneficios a la ciudadanía, pero eso no se cumplió. Sobre los temas de protección al medio ambiente, hay unas políticas muy restrictivas desde el Gobierno de Bachelet. Ahora mismo el presidente Piñera anunció que se va a comprar la flota de buses eléctricos, que van a ser menos contaminantes. Se trae una flota para lo que queda este año de 100 buses eléctricos que cuentan con wifi, y mayor espacio dentro de los buses”, dice el periodista.Para este propósito, el Gobierno de Chile también invirtió recursos porque, además de los buses, se deben construir algunos corredores eléctricos. Los costos se están evaluando todavía pero se trata de una alianza con privados y capitales españoles para poder materializar el nuevo sistema. Según Troncoso, los buses tienen un tiempo estimado de operación de cinco horas, pero con una capacidad de carga muy rápida para que no haya problemas con la movilidad.Chile planea convertirse en un ejemplo en el mundo y en la región sobre sistemas de transporte público a partir de buses sin emisiones contaminantes y sin riesgo para la salud de los habitantes.