Entre tantas historias de familias afectadas por el huracán Iota , que azotó la isla de Providencia , BLU Radio encontró a Marta Cecilia Cardona Ramírez, una madre de familia que vivía en una casa frente al mar, en el sector Braxon del municipio.
El huracán dejó en ruinas su casa ni las vigas que sostenían la vivienda se salvaron, al contrario, cayeron encima de la silla de ruedas en la que traslada a su hijo Maichel de 12 años, quien tiene una parálisis cerebral.
"Tiene un ‘aparatico’ en el corazón y una vena artificial hasta el cerebro", contó su mamá en medio de las lágrimas.
Con voz débil y acongojada dijo que lo perdieron todo, “menos la vida".
"¡Estamos vivos, mis niños están bien!", exclamó.
La tragedia de la pérdida de su casa se suma a que su hijo se está quedando sin los medicamentos esenciales para seguir con vida.
"Él usa salbutamol, ácido valproico, vitamina C y ahora necesita suero, porque se pone débil, también necesita un aparato para respirar, pero no hay energía", relató.
Por el momento, Marta y sus hijos, Maichel y Ana Isabella, pasan sus días en el sector Maracaibo, donde un familiar, quien intenta remover los escombros de un hotel que se destruyó y tapó el único acceso a la vivienda.
Marta, aseguró que Maichel es el único niño con esa condición en Providencia y solicitó ayuda para no perder la batalla ante la dureza de su última década de vida, luchando por el bienestar del joven tigreño y de rulos en el cabello.
Vea la historia completa en el siguiente video: