Preocupados están decenas de familias del suroccidente de Barranquilla por la canalización de la segunda etapa del arroyo La Felicidad, que inició en octubre de 2020 con la misión de acabar con la peligrosa corriente pluvial que atraviesa barrios como Lucero y Los Pinos.
Los habitantes de estos sectores denuncian que los trabajos tienen en riesgo sus casas, pues temen que estas colapsen durante la temporada invernal de la misma manera como han venido cediendo postes y andenes con las recientes lluvias.
Se pudo evidenciar varias afectaciones que podrían generar un colapso de viviendas, a raíz de la erosión que estaría relacionada con los trabajos de canalización
La situación fue puesta en conocimiento de la Agencia Distrital de Infraestructura, en cabeza del gerente Alberto Salah, quien visitó las zonas afectadas y aseguró que ya se están haciendo los correctivos.
"Ya se empezaron a corregir algunas socavaciones producto de estas correntías que tenían la tendencia a producir afectaciones. Ya todo esto lo hemos venido manejando, sabemos que todas estas obras de gran envergadura, en las que al final tenemos que rehacer la ciudad sobre un área ya consolidada, causan este tipo de efectos", dijo Salah.
De acuerdo con la Alcaldía, las obras de canalización del arroyo La Felicidad registran un avance del 87%.