La Alcaldía de Bucaramanga adelanta estudios de vulnerabilidad y riesgo por movimientos en masa en 18 asentamientos humanos, ubicados en el norte y suroccidente de la ciudad, para determinar si pueden o no ser legalizados.
Barrios como Divino Niño I, San Valentín, Campestre Norte, La Guacamaya, El Fonce, San Gerardo, entre otros, están siendo objeto de revisión en sus terrenos.
La alcaldía ha invertido $2.000 millones en la elaboración de los estudios que serán claves para que las familias logren tener escrituras de sus viviendas construidas en zonas de invasión.
“Próximamente haremos la convocatoria para contratar la actualización de los estudios de AVR en las comunas 10 y 11; estamos trabajando con la Sociedad Santandereana de Ingenieros para que nos indique los próximos asentamientos a intervenir”, indicó Joaquín Tobón, secretario de Planeación de Bucaramanga.
La Alcaldía de Bucaramanga se encuentra en la etapa final de la legalización de los barrios El Rosal y La Fortuna.
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