El esloveno Tadej Pogacar se coronó este domingo en París como campeón del Tour de Francia 2025, sumando así su cuarto título en la 'Grande Boucle' (2020, 2021, 2024 y ahora 2025). Con esta victoria, igualó al británico Chris Froome y quedó a solo una conquista de los históricos Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Bernard Hinault y Miguel Induráin, quienes suman cinco coronas.Aunque ya tenía asegurado el maillot amarillo desde días atrás, Pogacar no se guardó nada y peleó hasta el final por la etapa en la capital francesa, donde fue cuarto. El belga Wout van Aert (Visma-Lease a Bike) se llevó el triunfo del día, tras imponerse en solitario luego de un ataque en el último ascenso a Montmartre.Una última etapa con emoción y lluvia en ParísLa etapa de cierre volvió a la capital francesa tras un año de ausencia debido a los Juegos Olímpicos de París 2024. Esta vez, el recorrido incluyó tres pasos por el barrio de Montmartre, con una subida corta pero exigente de 1,1 kilómetros al 5,9 % de inclinación.La lluvia, que no dio tregua, obligó a los organizadores a neutralizar los tiempos a 50 kilómetros de la meta para evitar caídas. Sin embargo, eso no impidió que Pogacar intentara el doblete y que el público parisino disfrutara de una jornada festiva, con bailarinas del Moulin Rouge y hasta un pintor retratando al campeón en plena Rue Lepic.Un podio de lujo y más maillots para la vitrinaEn la clasificación general, Pogacar le sacó 4 minutos y 24 segundos al danés Jonas Vingegaard, su eterno rival. El alemán Florian Lipowitz (Red Bull-Bora) fue tercero y, además, se llevó el maillot blanco como mejor joven, siendo el primer alemán en el podio desde Andreas Klöden en 2006.El maillot verde de la regularidad fue para el italiano Jonathan Milan (Lidl-Trek), uno de los mejores velocistas del pelotón.A sus 26 años, Pogacar ya acumula 22 victorias de etapa en el Tour y sigue agrandando su leyenda. Con una sonrisa y los brazos en alto, cerró otra edición inolvidable, ya con la mirada puesta en alcanzar el olimpo de los cinco grandes campeones.
El ciclista australiano Kaden Groves (Alpecin-Deceuninck) se llevó este sábado una victoria inolvidable en la penúltima etapa del Tour de Francia 2025. Groves, especialista en los sprints y con amplia experiencia en grandes vueltas, supo aprovechar una jornada caótica marcada por la lluvia y una caída que cambió por completo el panorama.Cuando todo indicaba que Iván Romeo (Movistar) podía luchar por su primera victoria en el Tour, una curva mojada le jugó una mala pasada. El español se fue al suelo junto al francés Romain Gregoire a 21 kilómetros de la meta, justo cuando lideraban la escapada. Romeo se golpeó las costillas con un bordillo y quedó fuera de combate, abriéndole camino a Groves.Pogacar acaricia su cuarto Tour de FranciaMientras el australiano celebraba su primer triunfo en la ‘Grande Boucle’, el esloveno Tadej Pogacar entraba con tranquilidad al grupo de favoritos, siete minutos después. La general no sufrió modificaciones, y todo indica que Pogacar subirá este domingo al podio en París vestido de amarillo, consagrándose por cuarta vez campeón del Tour de Francia.La subida a Montmartre en la última jornada podría definir el triunfo de etapa, pero no se espera que altere las posiciones del podio.Tercer triunfo para el Alpecin-DeceuninckCon esta victoria, Groves suma la décima de su carrera en grandes vueltas y le entrega a su equipo, el Alpecin-Deceuninck, el tercer festejo en esta edición del Tour. Lo hizo sin la compañía de sus jefes de filas habituales, Jasper Philipsen y Mathieu van der Poel, quienes abandonaron la carrera días atrás.A sus 26 años, Groves demostró que también puede brillar en solitario, en una etapa que lo consagra como uno de los nombres propios de esta edición del Tour.
Menos de una semana después de su victoria en Superbagnères, el neerlandés Thymen Arensman (Ineos) se pellizcaba en la cima de La Plagne, bajo la intensa lluvia alpina, no se creía su segundo triunfo en el Tour en el año de su debut, además ante "los extraterrestres" Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard."No me doy cuenta de lo que acabo de hacer", fue lo primero que dijo Arensman en La Plagne, donde se convirtió en el sucesor de su compatriota Michael Boogerd, quien alzó los brazos en la misma cima hace 23 años."Estoy destrozado. No lo puedo creer. Ganar una etapa ya era increíble. Eso ocurrió desde la escapada, pero hoy lo conseguí contra los corredores de la general, los más fuertes del Tour. Parece un sueño. He ganado a dos extraterrestres", dijo emocionado.Arensman llegó al pie de La Plagne con su compañero Tobias Foss, pero luego el noruego cedió y dejó al neerlandés a solas con los grandes monstruos de la general."En la subida lo tenía todo bajo control y pensé que los favoritos iban a marcarse entre sí. Tadej y Jonas son prácticamente extraterrestres, los ciclistas más fuertes del pelotón. Y quiero vencerlos como un mortal. No puedo creer que lo haya logrado. Es una locura", concluyó.Humano contra extraterrestres "Se trata de Tadej y Jonas. Todo el mundo sabe que son los mejores del mundo, casi unos extraterrestres, y yo soy sólo un ser humano. Pero acabo de ganarles, es una locura", añadió.Luego de haberse escapado al inicio de la subida final, el escalador de 25 años no contó con más de medio minuto de margen, pero le resultó suficiente para no ser alcanzado en ningún momento por la dupla Pogacar-Vingegaard.¿Pero hubiera logrado esa victoria si Pogacar se hubiese mostrado más ambicioso? La misma pregunta fue formulada al esloveno en conferencia de prensa. "No lo sé, yo contaba los kilómetros para el final. Arensman iba fuerte, bravo por él. Yo imprimía un ritmo defensivo en el que estaba cómodo y que me permitía responder a un eventual ataque".Pogacar añadió que el protocolo del maillot amarillo le está haciendo mella, y que es difícil "estar concentrado y motivado cada día".Bajo una intensa lluvia, en una etapa que resultó menos emocionante de lo esperado, los dos hombres que se reparten las cinco últimas ediciones del Tour se vigilaron mutuamente en la subida a la estación de esquí alpina, antes de que el danés esprintase en los últimos metros previos a meta en busca de un honor más moral que práctico de cara a la general.Pogacar se mostró más conservador de lo que en él es habitual, o quizá con menos fuerzas de las que presentó en la primera mitad de la carrera. 'Pogi' se limitó a defender su ventaja, mientras que Vingegaard también pareció resignado a su segundo puesto en la general.
La decimonovena etapa del Tour de Francia, prevista para este viernes entre Albertville y La Plagne, tuvo que ser acortada y no pasó por el Col des Saisies, debido a un brote de dermatosis nodular contagiosa detectado en un rebaño de vacas.La medida, que podría implicar el sacrificio de los animales afectados, fue anunciada por los organizadores la noche del jueves."El descubrimiento de un brote de dermatosis nodular contagiosa en un rebaño situado en el Col des Saisies ha obligado a sacrificar a los animales", anunció ASO, la empresa organizadora del Tour."Ante la angustia de los ganaderos afectados y para preservar la serenidad de la carrera, se ha decidido, de acuerdo con las autoridades, modificar el recorrido de la 19ª etapa Albertville-La Plagne y no atravesar el Col des Saisies", agregó ASO.La etapa solo cubrió 95 kilómetros en lugar de los 129,9 km previstos inicialmente.La salida ficticia se mantuvo en Albertville, como estaba previsto, pero se retrasó alrededor de una hora. A continuación, la carrera retomó su recorrido original poco antes de Beaufort, en el kilómetro 52,4 de la ruta inicialmente prevista, precisó la organización.Ganador de esta recortada etapaEl neerlandés Thymen Arensman se impuso este viernes en la última etapa de montaña del Tour, con final en La Plagne, superando por apenas dos segundos a Jonas Vingegaard y a Tadej Pogacar, que sale de los Alpes con el cuarto título muy encarrilado.Fue el segundo triunfo parcial para Arensman en este Tour, después de haberse llevado otro final en alto, en Superbagnères en la 14ª etapa, en los Pirineos.Luego de haberse escapado al inicio de la subida final, el escalador de 25 años no fue alcanzado en ningún momento por la dupla Pogacar-Vingegaard.
El danés Jonas Vingegaard aceptó la derrota en el Tour de Francia y afirmó que el esloveno Tadej Pogacar lo merece porque "es el más fuerte"."Ha sido el más fuerte, merece ganar. Hay un momento en el que tienes que aceptarlo y lo acepto", aseguró el ciclista del Visma tras la última etapa de alta montaña.Vingegaard, que tiene casi cuatro minutos y medio de desventaja, dijo que en esta jornada, con meta en la cima de categoría especial de La Plagne, ya no intentó restar tiempo a Pogacar y que su único objetivo era sumar una victoria de etapa."Para ser honesto, lo que perseguía era la victoria de etapa. Desgraciadamente Thymen Arensman ha hecho un buen trabajo y ha merecido ganar, ha sido muy fuerte. En el final no intentaba recuperar tiempo sobre Tadej. Desgraciadamente no he podido ganar", señaló.Einer Rubio: "Teníamos que jugárnosla de salida"El colombiano Einer Rubio se mostró satisfecho de haber intentado ganar la decimonovena etapa del Tour de Francia con una escapada temprana que no pudo llevar hasta el final."Teníamos que jugárnosla de salida, hacer la primera subida muy rápido, pero no ha sido posible. Nos ha llegado el grupo de favoritos por detrás. Pero, bueno, lo hemos intentado y estoy satisfecho por ello", aseguró el corredor de Movistar.Rubio aseguró que la etapa de la víspera fue más dura, pero la de La Plagne tampoco fue fácil: "Pero estamos acostumbrados a guerrear"."Sabía que hoy sería una batalla, porque recortaron la etapa y sería muy explosiva. Todo el mundo se motiva y pasan estas cosas", agregó en alusión a la mutilación del recorrido final en 36 kilómetros y dos puertos por un brote de "dermatitis nodular contagiosa" que afectó al ganado en la zona del Col des Saisies y que obligó al sacrificio de los animales. Por cuestiones de seguridad, se acordó el desvío del recorrido.
El esloveno Tadej Pogacar consideró que tuvo "una buena jornada" en la que fue segundo y acrecentó su ventaja en la general y señaló que los ataques del Visma del danés Jonas Vingegaard "no sirvieron para nada".El corredor del UAE consideró que el Tour todavía no está ganado y advirtió de que queda la jornada de mañana, que auguró muy dura."Veremos qué pasa mañana, es otro día muy duro. Si la etapa es como la de hoy estoy más tranquilo porque el equipo ha estado muy fuerte. El Visma lo ha intentado todo, pero no les ha servido para nada, mis compañeros me han defendido bien, hemos estado muy cohesionados", señaló el campeón del mundo."Mañana correremos con el mismo planteamiento, buscando también sobrevivir, igual que hoy. Puede que busquemos la victoria en la etapa de los Campos Elíseos", afirmó.El esloveno indicó que no la buscó en la Loze, un puerto donde hace tres años sufrió mucho, porque se subió por una vertiente diferente a la de 2022, menos dura."La otra vertiente es más dura, me gustaría pronto poder afrontar una etapa por esa vertiente, entonces sí iré a buscar la victoria. Hoy era más fácil, aunque es dura, pero la otra es peor", comentó."Hoy era difícil sacar ventajas, pero estoy contento de seguir de amarillo y de haber sacado algo de renta, ha sido un buen día", dijo.
El esloveno Tadej Pogacar chocó sin gravedad con un coche del Visma, equipo de su rival Jonas Vingegaard, mientras se dirigía a la salida de la 17ª etapa del Tour de Francia, este jueves en Vif."Íbamos hacia la línea de salida en medio de coches, no había peligro por delante. Íbamos detrás del coche (de la formación Visma), quizá un poco demasiado cerca, y el conductor frenó de repente. No sé si lo que quería era controlar mis frenos", bromeó el maillot amarillo para la televisión británica antes de la salida."No vi por qué pegó el frenazo (...) pero todo va bien", tranquilizó el esloveno de 26 años, que pudo tomar sin problemas la salida de la etapa reina del Tour de Francia en los Alpes.En el programa: tres puertos de categoría especial, entre ellos el temible col de la Loze, donde Tadej Pogacar vivió uno de sus peores días como corredor, en 2023.Pogacar lidera la general con más de cuatro minutos sobre el danés del Visma Jonas Vingegaard.O'Connor gana en la Loze, Pogacar anula la estrategia del VismaEl australiano Ben O'Connor (Jayco AlUla) se impuso este jueves en solitario en una de las etapas reinas, con llegada en el puerto de la Loze, de categoría especial.En la pelea por la general, el maillot amarillo salió indemne, e incluso reforzado, de las maniobras del Visma de Jonas Vingegaard, al que se le agotan el tiempo y los kilómetros para un cada vez más improbable vuelco en la general.El colombiano del Movistar Einer Rubio fue adelantado a unos metros del final por Pogacar (2º en meta), que amplió su ventaja al frente de la general en otro puñado de segundos.Luego de haber dejado aislado a 'Pogi' en el col de la Madeleine -segundo puerto de categoría especial del día-, Jonas Vingegaard no tuvo fuerzas para sacar provecho de esa ventaja numérica, y vio cómo varios compañeros de 'Pogi' en el UAE, entre ellos el ecuatoriano Jhonatan Narváez, contactaban con el grupo principal.Finalmente el maillot amarillo demarró para sacar 9 segundos en meta al danés, al que saca 4 minutos y 26 segundos en la general.
El ciclista colombiano Santiago Buitrago dijo este miércoles a la AFP que se encuentra mermado físicamente en este Tour de Francia pero, después de haber sido tercero en la etapa del martes, espera "dar lo mejor" en las jornadas que quedan hasta la meta final del domingo."Quedan dos etapas en las que todavía se puede esperar algo y espero seguir sacándole el máximo a mi cuerpo. No estoy al 100 %, pero intento dar lo mejor", declaró el corredor del Bahrain en la salida de Bollène, antes de una 17ª etapa que conduce al pelotón hasta Valence.El Tour de Buitrago quedó muy condicionado en la etapa con final en Muro de Bretaña, la séptima de esta edición, el pasado 11 de julio. Allí se vio implicado en una fuerte caída cerca del final y cruzó la meta con el maillot rasgado y heridas visibles."No ha sido para nada el Tour que esperaba. Venía con otras ilusiones y otros objetivos. Después de la caída todo ha cambiado bastante", admitió.El martes, Buitrago (25 años) consiguió un meritorio tercer puesto en la 16ª etapa, con meta en alto en el Mont Ventoux, a solo 4 segundos del francés Valentin Paret-Peintre y del irlandés Ben Healy, primero y segundo del día respectivamente."Lo de ayer es simplemente eso, el querer sacar algo bueno después de todo", explicó Buitrago en su charla con la AFP.En la general empezó la 17ª etapa como 46º, a casi dos horas del líder Tadej Pogacar y a una hora y 50 minutos del podio, por lo que su objetivo en los días que quedan es dar alguna alegría a su equipo y a su país en las etapas de montaña.
Un hombre fue interceptado por un policía y por un miembro de la organización del Tour de Francia cuando buscaba cruzar en bicicleta la línea de meta de la 17ª etapa, justo antes de la llegada de los corredores este miércoles a Valence, según constataron fotógrafos de la AFP.El incidente, que no fue difundido por televisión, tuvo lugar apenas unos minutos antes del esprint final.El hombre, con casco negro y maillot del equipo francés Decathlon-AG2R La Mondiale, fue derribado sobre el asfalto de forma contundente.En las fotos de la AFP se puede reconocer también al hombre encargado de las llegadas, empleado de la empresa organizadora del Tour, ASO, quien había placado a un militante propalestimo en la meta de la 11ª etapa el pasado miércoles en Toulouse.Por el momento, ASO no ha emitido ningún comentario para explicar los hechos.Así terminó la etapa 17Sin el belga Tim Merlier o el eritreo Biniam Girmay, descartados tras una caída a 800 metros de meta, fue Jonathan Milan el que se llevó la victoria al esprint este miércoles en la 17ª etapa del Tour de Francia.El coloso italiano del Lidl-Trek, de 1,96 metros de altura, se embolsó 50 puntos que refuerzan su maillot verde y le despejan el camino para poder vestir en París el domingo la túnica que premia al corredor más regular en las llegadas y en los esprints intermedios.La lluvia, presente en los últimos 40 kilómetros de etapa con salida en Bollène, fue protagonista en el final en Valence, causando una caída en la que se vieron implicados varios hombres llamados al menos a obligar a un esfuerzo extra a Milan para llevarse su segunda victoria de etapa en este Tour.Aunque ninguno pareció haber sufrido daños que le impidan continuar la carrera, la llegada final perdió espectacularidad en tanto en cuanto dejó casi sin rivales a Milan.Al término de la etapa, el esloveno Tadej Pogacar conservó su holgado maillot amarillo en la víspera de la etapa reina en los Alpes.
Ante las acusaciones de arrogancia y los reproches por un dominio tan acentuado en el Tour de Francia, el maillot amarillo Tadej Pogacar aseguró este miércoles que su equipo no hace nada "para resultar arrogante", sino que trata simplemente de "hacer fácil la carrera"."La arrogancia es una cosa, tratar de ganar el Tour de Francia es otra", estimó el esloveno, cuyo equipo suma cinco triunfos de etapa y parte con todo a favor para conquistar el Tour.El martes se alzaron voces críticas, como la del director del TotalEnergies Jean-René Bernaudeau o del comentarista y exciclista Thomas Voeckler, que censuraron el comportamiento de Nils Politt, el compañero alemán de Pogacar, que reprendió a varios corredores que trataban de formar una escapada camino del Mont Ventoux.Un intento de intimidación finalmente infructuoso: unos kilómetros más adelante se formó una fuga de 34 corredores, de la que salió el vencedor de etapa, el francés Valentin Paret-Peintre."Muchos corredores pueden vernos como arrogantes, como ayer, cuando tratamos de calmar las cosas, porque somos el equipo que debe controlar cada kilómetro de esta carrera", afirma "Pogi".Las críticas arreciaron los últimos días luego de la exhibición de Pogacar en los Pirineos y la de su compañero Tim Wellens en Carcasona, victorioso después de una escapada, reprochando la voracidad de victorias de la formación emiratí."Tenemos que ver las cosas desde nuestra óptica, tratamos de no ser arrogantes, tratamos de hacer la carrera lo más fácil posible", añadió el triple ganador del Tour."Creo que algunos chicos deberían calmarse, en mi opinión, y puede parecer superarrogante decir eso, pero bueno...", concluyó.
El esloveno Tadej Pogacar (UAE), vigente doble campeón del Tour de Francia, aseguró este jueves luego de adjudicarse la sexta etapa del Tour de Francia y de colocarse líder de la general que su objetivo "no era tomar el maillot amarillo"."El objetivo no era tomar el maillot amarillo, pero estoy muy feliz por la victoria", admitió Pogacar, que superó en un esprint hacia arriba al australiano Michael Matthews y al francés David Gaudu, con el colombiano Nairo Quintana en cuarto lugar."La etapa fue muy dura, las dos primeras horas fueron local, el más fuerte (Van Aert) estaba en la escapada y muchos corredores querían estar delante. En un momento dado me pregunté si lo alcanzaríamos, pero el pelotón fue más fuerte. Después, como me encontraba bien, el equipo trabajó mucho para colocarme en la mejor posición", explicó el principal favorito para vestir de amarillo en París."¿El esprint? No fue un esprint puro. Fuimos muy rápido en las dos últimas subidas. Afortunadamente tenía buenas piernas", añadió Pogacar, que manda en la general con 4 segundos de ventaja sobre Neilson Powless y 31 segundos sobre el segundo clasificado el año pasado, el danés Jonas Vingegaard.Clasificación general Tour de Francia tras la 6ª etapa1. Tadej Pogacar (SLO/UAE Emirates) 20 h 44:44.2. Neilson Powless (USA/EF1) a 4.3. Jonas Vingegaard (DEN/JUM) 31.4. Adam Yates (GBR/INE) 39.5. Thomas Pidcock (GBR/INE) 40.6. Geraint Thomas (GBR/INE) 46.7. Aleksander Vlasov (RUS/BOR) 52.8. Daniel Martínez (COL/INE) 1:00.9. Romain Bardet (FRA/DSM) 1:01.10. David Gaudu (FRA/GFJ) 1:02.11. Nairo Quintana (COL/ARK) 1:05.12. Enric Mas (ESP/MOV) 1:12.13. Mattia Cattaneo (ITA/DEC) 1:12.14. Jakob Diemer Fuglsang (DEN/ISR) 1:16.15. Aurélien Paret-Peintre (FRA/AG2) 1:21.Le puede interesar: escuche el podcast Fragmentos:Le puede interesar: las noticias curiosas del deporte con Entretiempo
La quinta etapa del Tour de Francia, que ganó el australiano Simon Clarke, tuvo varías caídas durante la jornada que estuvo marcada por los adoquines. Sin embargo, los colombianos Nairo Quintana, Rigoberto Urán y Daniel Felipe Martínez escalaron posiciones en la clasificación generalEl líder del Arkéa Samsic llegó en la posición 14 en la meta a 1:04, junto a los favoritos en este miércoles. El 'escarabajo' expresó que la preparación que ha tenido en las montañas boyacences le sirvió para asumir la etapa.“Somos un equipo joven, pero supimos defendernos, parte del equipo que estuvo aquí estuvo en la París-Roubaix y conocen bien el terreno”, añadió.Asimismo, Nairo Quintana comentó que ya son pocos los ciclistas de su década en Colombia que todavía siguen compitiendo y por eso se debe disfrutar diariamente.“Los de mi década ya somos pocos, también (hay) pocos con ganas. Así que disfrutar cada momento, no todo es ganar, es hacer papeles importantes y dar de qué hablar en el día de hoy”, añadió.Sensaciones de Rigoberto UránEl paisa, del EF, indicó que espera que este jueves empiece un "nuevo Tour de Francia", pues había mucha tensión en el grupo por las primeras etapas, aunque ahora deberán afrontar más de 200 kilómetros. Asimismo, aseveró que la lucha por el maillot amarillo "no es charlando".Daniel Martínez tras la etapa 5El colombiano reconoció que se salvó el día, porque era una etapa muy nerviosa, todos debían estar atentos para evitar caídas y no ceder tiempo en la general.
Los adoquines de la París-Roubaix entran en el menú de la quinta etapa del Tour, este miércoles, entre Lille y Arenberg, en uno de los días más temidos para los corredores de la clasificación general.Los organizadores han dispuesto 19,4 kilómetros de pavés repartidos en 11 sectores casi íntegramente en la segunda mitad del recorrido de 157 kilómetros en el departamento del norte de Francia."De los 11 pasos de pavés, cuatro están presentes a menudo en la París-Roubaix", indicó el director de carrera Thierry Gouvenou. "Los más largos fueron situados al final. Son también los más técnicos".A la salida del último sector, llamado el Pont Gibus, restarán apenas 5 kilómetros para llegar a la meta instalada en Arenberg. El Tour pasará por tercera vez por Arenberg, donde se rodó la película Germinal, basada en la novela homónima de Émile Zola.En los anteriores pasos la victoria fue para sendos especialistas en el pavés: el noruego Thor Hushovd (2010) y el neerlandés Lars Boom (2014).Escuche aquí el podcast de Cómo como:
El traqueteo de la bicicleta sobre los adoquines, apiñados en estrechas vías agrícolas jalonadas de diminutas cunetas de tierra, son el mejor antídoto contra lo previsible en el ciclismo.Por vez primera desde 2018 el Tour de Francia se ha apuntado a esta receta para tratar de dar emoción a la carrera en la primera semana y romper los guiones escritos con antelación y que colocan a Tadej Pogacar como el favorito indiscutible para la victoria final.En ese ejercicio, los adoquines aparecen como un ejercicio perfecto para buscar lo desconocido. Tras dos décadas ausentes del Tour, desde hace once años aparecen de forma cíclica en el recorrido y provocan siempre la misma admiración y críticas.Como aseguraba el patrón del Tour, Christian Prduhomme, antes del inicio en Copenhague, la primera semana de competición ofrece material para que los candidatos a destronar a Pogacar hagan temblar la jerarquía antes de que llegue la alta montaña, donde su superioridad parece menos cuestionable.Es el caso del Jumbo, el principal opositor a Pogacar, que cuenta con dos bazas, el también esloveno Primoz Roglic y el danés Jonas Vingegaard, segundos en las dos últimas ediciones.Junto a Wout van Aert, cuya potencia permite casi sobrevolar los "pavés", el conjunto holandés se ha traído al Tour al francés Christophe Laporte y al belga Nathan van Hooydonk para tratar de dar un golpe de efecto en esa etapa.Los organizadores han tomado cuatro tramos de la Roubaix, otros dos conocidos de otras clásicas pero que no se utilizaban desde 1983 y cinco inéditos, con el fin de llevar la carrera al terreno más desconocido posible.TRAMOS MÁS LARGOS Y TÉCNICOSEl tour ha buscado tramos más largos y técnicos que en el pasado, con el objetivo de que las diferencias en la meta sean superiores y que la etapa sea más decisiva.El pueblo de Emerchicourt, de apenas 900 habitantes, puede ver su nombre marcado en letras doradas al término de la etapa. A él, una aldea acostumbrada a recibir los cuatro días de Dunkerque pero no el Tour, llega el octavo sector y de él parte el 7.Aunque el mayor peligro llegará un poco más adelante en la jornada, cuando los ciclistas afronten tres sectores de más de dos kilómetros prestados por la Roubaix, donde recuperar tiempo parece "una tarea imposible", según el alemán John Degenkolb, el último en ganar en el Tour una etapa con "pavés".¿Será suficiente para hacer vacilar al favorito? No parece sencillo, porque el esloveno ha demostrado ya en el pasado que se desenvuelve bien en todos los terrenos. Su prestación en la Strade Bianche o en el pasado Tour de Flandes, aunque con adoquines diferentes, demuestran que Pogacar no es un neófito en ese terreno.Además, el ganador de las dos últimas ediciones acudió a reconocer el terreno hace unos meses, prueba de que tampoco ahí quiere dejar escapar un Tour que todo el mundo le promete.Pogacar aparece menos respaldado, pero eso no implica que vaya a perder tiempo en un terreno donde las diferencias pueden ser más grandes que en una etapa de montaña, según Degenkolb.El ciclista del equipo DSM, que también sabe lo que es ganar la Roubaix, en 2015, reconoce que no es lo mismo afrontar esos tramos en la ronda gala que en el "infierno del norte", porque en esta segunda la mayor parte de los participantes son especialistas en la materia, mientras que en el Tour todos tienen que someterse a esa tortura."Se puede mascar el miedo, la aprehensión de algunos a afrontar este tipo de ejercicios, lo que confiere a la jornada un nerviosismo especial", agrega.Los ciclistas deberán atravesar once sectores adoquinados que totalizan algo menos de 20 kilómetros concentrados en los 78 finales de una etapa de 157 entre Lille y Arenberg.Aunque la dosis de adoquines es similar a la de hace cinco años, los especialistas consideran que las diferencias pueden ser superiores, ya que se trata de tramos más largos y técnicos, lo que favorece las pérdidas de tiempo de aquellos que no sepan digerirlos.La jornada parece propicia para lanzar las hostilidades de cara a la general. En los últimos años, algunos de los favoritos ya se dejaron buena parte de sus opciones en esas etapas, donde se combina la lucha por el podio con la de ganar una prestigiosa etapa.El miedo que genera este tipo de jornadas llega incluso a la organización, que modificó el primero de los tramos al considerar que, tal y como se afrontaba, podía llevar al pelotón a demasiada velocidad y provocar accidentes indeseables.En 2010 el luxemburgués Frank Schleck tuvo que abandonar en una etapa sobre adoquines, al igual que le sucedió cuatro años más tarde al británico Chris Froome también se marchó de la carrera cuando perseguía su segundo Tour, tras haber ganado el año anterior, lo que despejó el camino para que el italiano Vincenzo Nibale consiguiera su único triunfo en la carrera.Etapa 5: Lille - Wallers-Arenberg, 157 kmHora de salida: 14.00 horas (12.00 GMT)Hora prevista de llegada: 17.25 (15.25 GMT)Sectores adoquinados:Fressain a Villers-au-Tertr (km 77,3): 1,4 kmEswars a Paillencourt (km 102,2): 1,6 kmWasnes-au-Bac a Marcq-en-Ostrevent (km 107,9): 1,4 kmÉmerchicourt a Monchecourt (km 112,5): 1,6 kmAuberchicourt a Émerchicourt (km 115,4): 1,3 kmAbscon (km 121,1): 1,5 kmErre a Wandignies-Hamage (km 129,6): 2,8 kmWarlaing a Brillon (km 135,8): 2,4 kmTilloy-lez-Marchiennes a Sars- et-Rosières (km 139,2): 2,4 kmBousignies a Millonfosse (km 144,8): 1,4 kmHasnon a Wallers (151,9): 1,6 km.Le puede interesar. Escuche el podcast Fragmentos:
El colombiano Nairo Quintana consideró "complicada" la cuarta etapa del Tour de Francia, que acabó en el grupo de los favoritos de la general, pero aseguró que las primeras jornadas han comenzado ya a desgastar a los corredores, aunque dijo que está en buena condición."Ha sido una etapa complicada desde el inicio, serpenteó menos de lo que pensábamos, pero todo el día hubo cortes y tensión. Al final ha arrancado el favorito, es un ciclista increíble", dijo el corredor del Arkea.Quintana afirmó que se consiguió el objetivo de no ceder tiempo con respecto a los favoritos en esta primera semana. "Seguimos en nuestra línea, sin perder tiempo con los favoritos y estando muy atentos"."Todavía queda mucho, el jueves será un nuevo test", afirmó con respecto a la etapa de adoquines de este miércoles."Comenzamos a gastar fuerzas, tenemos que hacer esfuerzo para estar adelante, pero de momento estamos bien", agregó.Le puede interesar: Al pelo con Tata
El belga Wout van Aert se impuso en la cuarta etapa del Tour de Francia, tras haber firmado en las tres primeras la segunda posición, con un ataque brutal a falta de diez kilómetros que sorprendió a todo el pelotón.El ciclista del Jumbo afianzó con esta sexta victoria en la ronda gala el maillot amarillo que se vistió en la segunda.El belga ganó la meta con una renta de 8 segundos sobre su compatriota Jasper Philipsen, que lideró el pelotón principal de favoritos y que alzó los brazos como si hubiera ganado.La tranquila jornada entre Dunkerque y Calais, con 171,5 kilómetros, se saldó con un golpe de efecto del Jumbo en el ascenso a la cota de Cap Blanc-Nez, a 10 kilómetros de la meta, que reventó al pelotón.De la deflagración sobrevivió solo Van Aert, que con el maillot amarillo demostró su potencia y clase y completó el tramo final en solitario para sumar su sexto triunfo en el Tour.Escuche el podcast de Cómo como aquí:
La caravana del Tour saltó desde Dinamarca al norte de Francia para disfrutar de una primera semana de descanso que no agradó a todo el mundo, pues algunos consideran el parón innecesario después de solo tres días de competición. Un traslado que colocó al pelotón ante una semana atractiva en la que se van a presentar dos citas claves: los adoquines de la Roubaix el miércoles y la primera llegada en alto del viernes en La Planche des Belles Filles."Sólo hemos corrido 3 etapas, y cuando estás cogiendo el ritmo tienes que viajar y parar. Yo no tenía ganas de descansar aún ni de tener el día libre", dijo el británico Geraint Thomas, ganador del Tour 2018, algo cansado después del traslado desde Sonderborg a Lille.El doble ganador del Tour, el esloveno Tadej Pogacar, se tomó la jornada con más filosofía, pero ante todo contento por el hecho de descansar. "Es como esos períodos de entrenamiento en los que haces tres grandes días de trabajo y luego un día de recuperación. Estoy ansioso por volver a competir", comentó el gran favorito de la 109 edición.RESPETO POR LA BATALLA DE LOS ADOQUINESLos equipos y caravana del Tour se repartieron principalmente en torno a Lille y Calais, en el entorno de las próximas etapas. En el debate dos citas que van a marcar la semana, y quien sabe si el Tour: la de los adoquines, la quinta etapa, entre Lille y Arenberg, con 11 sectores adoquinados que imponen respeto, marcada en rojo por las diferencias que puede arrojar. Y la séptima etapa como primer examen de montaña con la meta en la cima de La Planche des Belles Filles.El belga Wout Van Aert estrenará la semana con el maillot amarillo, y lo defenderá con uñas y dientes en un terreno que conoce y domina como gran clasicómano que es. Su batalla será la de prolongar el liderato, si bien el líder real para la general definitiva es Pogacar, el mejor colocado desde la crono inicial en Copenhague.Pogacar entrará en los primeros exámenes importantes con 8 y 9 segundos sobre Vingegaard y Roglic, 18 respecto a Geraint Thomas, 37 y 42 sobre los colombianos Daniel Martínez y Nairo Quintana y 49 delante del español Enric Mas.Todos los hombres de la general miran con respeto a la etapa del "pavé". Saben que el estropicio puede ser mayúsculo en un recorrido corto, de 157 km, con 11 tramos de traqueteo permanente que suman un total de 20 km, todos de más de 1 km de longitud. Una jornada que la mayoría de candidatos ha ido a inspeccionar en primavera, coincidiendo con la disputa de las grandes clásicas.Tadej Pogacar compitió este año por primera vez en A Través de Flandes y Tour de Flandes para acumular experiencia en el terreno adoquinado. Más tarde el ciclista del UAE reconoció el famoso tramo del Arenberg, una de las grandes referencias de la París-Roubaix.Otro corredor que se apuntó a la experiencia de correr sobre adoquines fue Primoz Roglic, quien destacó sus sensaciones después de correr el G.P Denain y ser protagonista dentro de una escapada.“Fue un día especial y difícil, pero salió bien. Es completamente diferente correr sobre adoquines. Aprendí cosas a las que no estaba acostumbrado, como el nerviosismo previo a las secciones de adoquines”, añadió Roglic, quien estuvo allí con Jonas Vingegaard, la otra baza del Jumbo-Visma para la general del Tour de Francia.Según recuerda Roglic, “buscar una buena posición es muy importante, y eso es lo que lo hace peligroso.El español Enric Mas también tendrá su bautizo en una jornada con tramos adoquinados. El balear y el equipo Movistar también aprovecharon las clásicas para acercarse al entorno de Arenberg y rodar en esa superficie."La etapa de los adoquines la hemos ido a ver 2-3 veces porque para mí es nueva. Creo que la puedo hacer bien, estoy motivado y me emociona porque es un escenario que has visto por televisión. Además sabes que las diferencias pueden ser grandes".LA PLANCHE DES BELLES FILLES, PRIMER DUELO DE ALTURATras la etapa adoquinada llegará una jornada de transición propicia para esprinters o aventureros entre Binche - Longwy, pero atención, después de la paliza del día anterior y con un recorrido de 220 km alguno se puede llevar algún disgustoEl viernes séptima etapa entre Tomblaine y La Super Planche des Belles Filles (viernes 8 de julio), primera gran llegada en alto del Tour de Francia con un recorrido de 176,3 kilómetros, cita que se ha convertido en clásica del Tour de Francia. En el escenario donde Roglic perdió el Tour 2020 ante Pogacar en 2020 los escaladores están llamados al combate. Tendrán 7 km al 8,7% con unas durísimas rampas del 20% y del 24.La semana se cerrará en Suiza con la octava y novena etapas, la primera entre Dole y Lausana, de media montaña, y la segunda entre Aigle y Châtel les Portes du Soleil que será exigente con 2 puertos de 1a, el Col de la Croix (8,1 km al 7,6) y el Col de Morgins, con la cima a 7 km de meta, que también tiene un tramo previo elevado.Una semana que presenta alicientes para la gestión de la general. Los clasicómanos tendrán ventaja en los adoquines. Van Aert y Van der Poel serán dos gigantes en un terreno que devora al débil o a aquel que tenga cualquier problema en un momento de refriega. Luego, en la montaña, los elegidos se dejarán ver en lo más alto. Empieza la lucha en el Tour de Francia.Este martes la cuarta etapa llevará al pelotón de Dunkerque a Calais con un recorrido ondulado de 171,5 km, que incluye 6 cotas de cuarta. Los aventureros y los esprinteres sobre aviso.Escuche aquí el podcast de Cómo como:
El ciclista belga Wout van Aert, segundo de las tres primeras etapas del Tour de Francia, fue sancionado con una multa de 500 euros y con 25 puntos UCI por haber tirado desechos fuera de la zona autorizada.Actualmente maillot amarillo del Tour, el corredor del Jumbo perdería un minuto si reincide en ese comportamiento, tal y como fue introducido el año pasado en el reglamento de la Unión Ciclista Internacional (UCI).Una tercera falta podría acarrearle incluso la exclusión de la carrera. El Tour de Francia toma una nueva salida con Van AertEl Tour de Francia vuelve a tomar la salida este martes, 5 de julio, en el norte del país, tras el preludio danés de gran éxito festivo y popular, con un maillot amarillo, el belga Wout Van Aert, y en espera de la aparición del favorito y ganador de las dos últimas ediciones, el esloveno Tadej Pogacar.¿Un escenario ideal para el último vencedor? La estancia danesa, con tres días de carrera, fue buena para el joven esloveno (23 años), sin contar algún moratón heredado de la caída colectiva en el final de la segunda etapa.Tercero en la general, tiene una desventaja de 14 segundos respecto a Van Aert, pero cuenta con 8 y 9 de ventaja sobre sus primeros rivales del equipo Jumbo, el danés Jonas Vingegaard y el esloveno Primoz Roglic."Si debo hacer un primer balance, diría que todo fue bien, me siento bien", reconoció el vencedor de 2020 y 2021. Su rango le descarga del control de la carrera y su colocación durante las etapas del sábado y del domingo revela su comodidad: hace pocas peticiones a su equipo UAE, en espera de los días más difíciles y sobre todo más arriesgados.Lea también Escuche el podcast de 'Bien Puesto'
La segunda etapa en suelo danés del Tour de Francia tendrá dos protagonistas: el viento que amenaza con destrozar en pedazos el pelotón en la primera parte del recorrido y los 18 kilómetros del puente de Grand Belt, que se sitúan a apenas dos de la meta.En los 202,2 kilómetros entre Roskilde y Nyborg, la carrera vivirá experiencias nerviosas en un recorrido casi costero que cuenta con tres puertos de cuarta categoría y en el que el peligro de abanicos será casi permanente.Con todo lo que está en juego, el pelotón no tendrá un momento de reposo, de tensión permanente que puede convertir la jornada en una auténtica batalla de nervios en la que todo es posible.Con la guinda final, 18 kilómetros al nivel del mar, en un magnífico puente que parece permitir rodar sobre las aguas entre las dos principales islas que componen el país escandinavo.A su salida, solo quedarán dos kilómetros hasta la meta de Nyborg, poco tiempo para reparar los daños que puedan efectuarse en la carretera que jalona el mar y que parece destinada a ser el juez de la jornada.Etapa 2: Rolkilde - Nyborg, 202,2 kmHora de salida: 12.35 (10.35 GMT)Hora prevista de llegada: 17.11 (15.11 GMT)Montaña:Cota d'Asnaes Indelukke (4a): 1,1 km al 5,4 %, a 140,8 km.Cota d'Hove Straede (4a), 800 metros al 6 %, a 129,7 kmCota de Karup Strandbakke (4a): 1,3 km al 5,8 % a 118,2 km.¿Cómo van los colombianos en el Tour de Francia?Culminada la primera etapa, estos son los tiempos de los pedalistas colombianos: Daniel Martínez (Ineos) cedió 44 segundos respecto al ganador, Nairo Quintana (Arkea) 49 segundos, y Rigoberto Urán (EF) 1 minuto y 14 segundos.Le puede interesar. Escuche el podcast Prueba Beta: