
El exministro de Minas y EnergíaAmylkar Acostacuestionó la propuesta del presidenteGustavo Petro de importar gas desde Catar, asegurando que Ecopetrol no está obligada a seguir sus instrucciones en esta materia. En una entrevista con Mañanas Blu, Acosta enfatizó que la compañía opera bajo un régimen corporativo y que cualquier decisión debe pasar por su junta directiva, previo estudio de mercado.
Reconocimiento de la escasez de gas en Colombia
Uno de los puntos destacados por Acosta es que el Gobierno, con esta propuesta, finalmente reconoce la escasez de gas en el país.
“Es un avance el hecho de que ya el Gobierno reconozca que hay escasez de gas y que hay que importarlo para poder suplir las necesidades de la demanda esencial”, afirmó. Sin embargo, criticó que el ministro saliente no haya aceptado antes esta realidad, atribuyendo el problema a un supuesto acaparamiento de las empresas.
Actualmente, Colombia ya ha comenzado a importar gas, con el primer despacho de 40 millones de pies cúbicos diarios arribando el pasado 1 de diciembre. Sin embargo, esto ha generado un aumento en las tarifas del 20 al 36 %, lo que ha impactado significativamente a los consumidores.
Ecopetrol y su autonomía en la toma de decisiones
Acosta explicó que, desde 2006, Ecopetrol dejó de ser una empresa industrial y comercial del Estado para convertirse en una sociedad anónima con régimen corporativo. Esto significa que el presidente Petro no puede imponerle decisiones directamente.
“Ecopetrol tiene que decidir dónde y a quién le va a comprar el gas y bajo qué condiciones. No es una instrucción del presidente la que tiene que cumplir”, sentenció.
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A pesar de que el gobierno tiene la mayoría en la junta directiva de la compañía, cualquier decisión debe ser evaluada con base en estudios de mercado.
“Para importar gas desde Catar, Ecopetrol necesita una infraestructura que hoy no tiene”, advirtió Acosta, señalando que la compañía firmó recientemente un contrato para la construcción de una planta regasificadora, la cual solo estará operativa a partir del próximo año.
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Dificultades logísticas para importar gas desde Catar
Según Acosta, la importación de gas natural licuado requiere instalaciones especializadas para su regasificación. Actualmente, la única planta con esta capacidad en Colombia es la de la Sociedad Portuaria El Cayao (SPEC), ubicada en Cartagena, cuya capacidad de 450 millones de pies cúbicos diarios ya está comprometida en su mayoría con el sector térmico.
“Ecopetrol prevé importar 60 millones de pies cúbicos diarios, pero solo a partir del año entrante, porque en este momento no hay manera de regasificar el gas importado”, explicó Acosta.
El costo del gas en el mercado internacional
Acosta también cuestionó la afirmación del presidente Petro sobre importar gas a “precios razonables”. Según el exministro, en el mercado global del gas no existen precios especiales para ningún país, sino que los valores están determinados por las condiciones del mercado.
“No hay precios razonables, lo que existe son precios de mercado en un mundo capitalista donde se transan el gas y el petróleo”, afirmó.
En este sentido, descartó que Catar ofrezca precios más bajos a Colombia en comparación con el gas importado desde la cuenca del Permian, en EE. UU. “Qatar, como todos los países productores de gas, transa sus volúmenes en un mercado con referentes internacionales”, aclaró.
Además, señaló que la falta de regulación para homologar los contratos de importación ha impedido la firma de acuerdos a largo plazo, lo que encarece el precio del gas. Actualmente, Colombia compra gas en el mercado spot, con contratos de corto plazo, lo que genera costos elevados.
“Si se firman contratos a dos o tres años, el precio es menor, lo que aliviaría el bolsillo de los consumidores”, concluyó.
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Impacto en los hogares colombianos
El aumento en el costo del gas importado ya se está reflejando en los bolsillos de los ciudadanos. “Los colombianos están sintiendo el impacto de pagar gas importado en sus casas, lo que afecta las finanzas de muchos hogares”, advirtió Acosta.
Finalmente, el exministro insistió en la necesidad de evaluar cuidadosamente las opciones de importación y buscar soluciones estructurales para garantizar el abastecimiento de gas en el país sin afectar la economía de los consumidores.
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