Cuando el Congreso aprobó el Presupuesto General de la Nación para el año 2024 por un total de $503.2 billones (B) en octubre de 2023, el Gobierno proyectaba obtener ingresos por un valor de $352.4 B durante todo el año. Sin embargo, análisis realizados por Investigaciones Económicas (IE) indican que los ingresos reales estarían alrededor de $292.3 B, lo que representa una diferencia de aproximadamente $60 B. Esto hace necesario implementar una estrategia de recorte en el gasto público para garantizar el cumplimiento de la Regla Fiscal (RF) y, por ende, la estabilidad de las finanzas públicas.
En la actualización del Plan Financiero (PF) realizada en febrero, debido al reconocimiento de menores ingresos de lo inicialmente previsto, se adoptaron medidas que incluyeron un recorte en el gasto primario (tanto en funcionamiento como en inversión) por un monto de $20.1 B, y un aumento en la previsión de endeudamiento para cumplir con la RF, elevándola en $15.4 B hasta alcanzar los $89.4 B. Sin embargo, a lo largo del año, los ingresos nuevamente resultaron ser inferiores a lo esperado y, dada la limitada flexibilidad, los análisis de IE indican que ahora se requiere un ajuste adicional en el gasto por un total de $48 B para cumplir con la RF.
Así las cosas, según el análisis del Banco de Bogotá, dada la complejidad de implementar estas medidas, los mercados financieros ya anticipan una posible rebaja en la calificación crediticia del país.
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