Millonaria extinción de dominio de bienes al Clan Herrera

Una millonaria e histórica extinción de dominioadelantó la Fiscalía General de la Nación contra el denominado Clan Herrera.

En total fueron 576 bienes, entre ellos 37 apartamentos, 93 casas, 62 parqueaderos, 8 fincas, 108 lotes proyecto de condominio, 16 oficinas, 2 sociedades, 3 establecimientos de comercio y 247 semovientes, los que fueron ocupados durante la diligencia.

Dentro de la ocupación también se encuentran 318 bienes en Cali, Cerrito, Jamundí, Tuluá, Yumbo, Ginebra, Calima, Palmira, Candelaria y Dagua (Valle del Cauca). Además, hay cinco más en zona rural de Cimitarra, Santander, 2 en Bogotá, 2 en Cartagena, Bolívar, 1 en Pereira, Risaralda, y 1 en Girardot, Cundinamarca.

Por lo anterior, está extinción de dominio se convirte en la más grande realizada en el país por el avalúo de dichas propiedades (5,6 billones de pesos).

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Asimismo, sobresale una hacienda ubicada en el lago Calima, cuya extensión supera las 137 hectáreas y está avaluada comercialmente en 3.3 billones de pesos.

Todos los bienes mencionados quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).

¿Cómo logró la extinción de dominio?

Dicha extinción se dio luego de la captura de William Herrera López, alias ‘W ’ y sobrino del extinto narcotraficante Hélmer ‘Pacho’ Herrera, quien puso al descubierto la millonaria fortuna ilegal que el asesinado capo del Cartel de Cali había dejado a nombre de presuntos testaferros en varios departamentos del país.

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En el lugar de la detención, realizada en agosto de 2019 en Cali, fueron encontrados libros, escrituras y certificados de tradición y libertad, los cuales contenían detalles de propiedades y de 35 supuestos propietarios.

Alias W quería recuperar bienes

Según lo reveló la Fiscalía, alias ‘W’ se habría aliado con un componente armado del Clan del Golfo para recuperar los inmuebles, sociedades y establecimientos comerciales que el Clan Herrera supuestamente obtuvo del tráfico de cocaína y que permanecían ocultos. A cambio, la estructura criminal supuestamente recibía el 30% del valor de cada propiedad.

318 bienes fueron ocupados en Cali, Cerrito, Jamundí, Tuluá, Yumbo, Ginebra, Calima,

Palmira, Candelaria y Dagua (Valle del Cauca); 5 más en zona rural de Cimitarra

(Santander), 2 en Bogotá, 2 en Cartagena (Bolívar), 1 en Pereira (Risaralda), y 1 en

Girardot (Cundinamarca).

Sobresale una hacienda ubicada en el lago Calima, cuya extensión supera las 137 hectáreas

y está avaluada comercialmente en 3.3 billones de pesos.

Todos los bienes quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).