Piques ilegales: un problema que desvela a Medellín

En un problema para conciliar el sueño y para la seguridad se han convertido los piques ilegales en varios puntos de Medellín, donde se citan motos y autos para competir. El sonido de vehículos a toda velocidad se siente varias noches durante la semana en lugares como la avenida Las Vegas a la altura de ciudad del Río o en Las Palmas, desde Llanogrande hacia Medellín.

Los participantes de estas carreras se citan por redes sociales, casi siempre, después de las 9:00 de la noche, cuando las calles empiezan a quedar vacías y una vez no ven obstáculos al frente, inician las competencias.

La situación se hace recurrente y parece no tener control en ciertos puntos de la ciudad, donde a pesar de realizar retenes, los autos vuelven y aparecen varios días después a competir en la pista pública.

Cuando no son los carros, son las motos, que al mismo tiempo hacen piruetas poniendo en peligro la vida de otros. Según Mario Ramírez, subsecretario de Seguridad Vial y Control, las autoridades usan diferentes estrategias para encontrarlos en los lugares que frecuentan, sin embargo, la problemática persiste.

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Aunque nunca se sabe dónde van a aparecer, ese despacho realiza los controles de forma sorpresiva para tratar de encontrarlos mientras conducen. Son varias las faltas que se penalizan en estos casos y pese a que no hay un número determinado de comparendos por noche, las sanciones por parte de la administración parecen no funcionar, pues cada vez se hacen más cotidianas las carreras en espacios públicos

Las personas que viven cerca a los lugares de encuentro les siguen pidiendo a las autoridades reforzar los controles de estas carreras ilegales, que pueden terminar con accidentes para lamentar. Además de pedir sanciones drásticas para evitar la reincidencia de las personas que participan.