
Antes de morir, mujer narró en un audio cómo su exnovio le quitó la vida
La joven fue apuñalada mientras hablaba por teléfono con su madre y su mejor amiga.

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Casi cinco años después del brutal asesinato de Laura Sardinha, un jurado del condado de Orange, en California, declaró culpable a su exnovio, Craig Charron, de 39 años, por el crimen que estremeció a la comunidad.
El 2 de septiembre de 2020, Sardinha, de 25 años, fue apuñalada en múltiples ocasiones en su apartamento mientras hablaba por teléfono con su madre y su mejor amiga. Durante el ataque, logró grabar un mensaje de voz de 37 segundos que resultó clave en el juicio. En él se la escucha gritar desesperada: “¡Me va a matar!” y “¡Aléjate de mí!”.
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“Si lo escuchan con atención, oyen a una mujer narrando su propio asesinato”, afirmó la fiscal adjunta Janine Madera al jurado durante los alegatos finales.
La relación entre Laura y Charron había sido corta pero marcada por el abuso. La joven había conseguido una orden de restricción el mismo día del crimen y había cambiado las cerraduras de su vivienda. Sin embargo, eso no impidió que el agresor ingresara armado con varios cuchillos. La joven recibió heridas mortales en el rostro, la cabeza y el pecho.
Al llegar al lugar, la policía encontró a Charron con heridas que, según los fiscales, fueron autoinfligidas para simular defensa propia. Su versión fue desestimada por la contundencia de las pruebas, entre ellas, un cuchillo doblado por la fuerza de las puñaladas.
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Durante el juicio se revelaron más grabaciones en las que Sardinha documentaba el abuso. En una de ellas se quejaba de no poder oír bien debido a un tímpano roto, presuntamente producto de un golpe. En respuesta, Charron le dice: “Masajea mis pantorrillas o termina esta relación”.
Ese mismo día, horas antes del crimen, el acusado habría exigido sexo oral, lo cual también quedó registrado. En el audio, ella le expresa: “Tú me das miedo porque no te vas”.
Testimonios de tres exparejas de Charron reforzaron el historial de violencia, detallando episodios similares y órdenes de restricción previas. Sardinha estudiaba Psicología y había recibido una indemnización de 750.000 dólares tras un accidente. Le entregó 100.000 a Charron, quien le escribió: “Gracias por mostrarme que eres toda mía”.
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