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Dos turistas japoneses fueron detenidos durante dos semanas en China y luego deportados por tomar fotografías mostrando sus nalgas en la Gran Muralla, según informaron medios japoneses.
El incidente, ocurrido en una sección de la icónica muralla cerca de Pekín, involucró a un hombre de 20 años que expuso su trasero y a una mujer que le tomó las fotos, según reportaron el jueves la cadena japonesa NTV y otros medios.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Japón confirmó el viernes que su embajada en China "recibió información el 3 de enero sobre la detención de dos ciudadanos japoneses por las autoridades locales en la Gran Muralla".
"Posteriormente, fueron liberados y regresaron a Japón en enero", añadió en un comunicado.
Los medios japoneses indicaron que los turistas fueron detenidos en el lugar por guardias de seguridad y permanecieron bajo custodia durante dos semanas. Según las fuentes, mostrar las partes íntimas en un espacio público es una violación de la ley en China.
De acuerdo con los reportes, los turistas explicaron a la embajada japonesa que actuaron como parte de una broma.
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