Bosa y Ciudad Bolívar despiertan con calma, Engativá con dolor por un muerto

de desmanes y violencia. Diana Calderón, alcaldesa de Bosa, informa que en sus localidad se decretó en la noche del jueves ley seca y toque de queda, y que se amanece con relativa calma, sin incidentes y con normalidad académica. Juan Carlos Amaya, alcalde de Ciudad Bolívar, confirmó que en la noche del jueves funcionaron la ley seca y el toque de queda. La movilidad está reestablecida y los únicos desmanes se presentaron en los límites con Soacha. “Tenemos una calma generalizada”, apuntó. Aseguró que junto a autoridades del Distrito y la Policía investiga a los autores de los desmanes del miércoles en la noche en los barrios Lucero Bajo y San Francisco, aunque afirmó que no necesariamente habría infiltraciones de la guerrilla de las Farc. Carlos Mauricio Amaya, alcalde de Engativá, comentó que si bien la jornada de protestas mostró tranquilidad al comienzo de la mañana del jueves, en la noche jóvenes en Engativá pueblo comenzaron a manifestarse y producto de los choques con el Esmad murió un joven de 24 años. Amaya manifestó que estaba presente en las revueltas y corroboró que los miembros del Esmad no portaban armas de fuego, pero sí se escucharon los disparos de arma corta que le habrían causado la muerte, al parecer causados por infiltrados. “Es claro que en medio de los disturbios de algún lugar salieron los disparos, esa fue la parte que más generó la conmoción de los manifestantes”, señaló. El alcalde local agregó que los disturbios se dispersaron sobre la media noche y en el amanecer del viernes la situación es de tranquilidad por las vías de la localidad.