El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, realiza un seguimiento al caso de Wilber Hoyos Meza, el niño de 7 años que fue encontrado muerto tras haber sido arrastrado por el arroyo ‘El Salao’, para determinar si sus padres tienen alguna responsabilidad en este caso.
La decisión fue anunciada por el director del ICBF en el Atlántico, Benjamín Collante, quien aseguró que la institución busca establecer los motivos por los cuales el menor jugaba, junto con su hermana adolescente, en uno de los arroyos más peligrosos del municipio de Soledad.
Lea también: Hallan sin vida a niño que había sido arrastrado por arroyo en Soledad, Atlántico
"Nosotros vamos a mirar con detenimiento qué fue lo que pasó, porque todos sabemos que el arroyo 'El Salao' ha sido peligroso toda la vida, no solo ahora que le han surgido otros afluentes", manifestó el funcionario.
Publicidad
Se conoció que el ICBF también brindará acompañamiento psicológico a la hermana del pequeño, una menor de 13 años que, aunque fue rescatada con vida por organismos de socorro, afronta un difícil proceso por la pérdida de su hermano.
Publicidad