Esta vez el foco de incendios forestales fue en zona rural de Marandua, departamento de Vichada, donde en los últimos días se han presentado una serie de incendios que han consumido una gran parte de hectáreas en la región.
Ante ello, las Fuerzas Militares se articularon para realizar labores por aire y tierra, desplegando sus esfuerzos para controlar las llamas, en articulación con los bomberos, lo que permitió el control del incendio forestal.
Para evitar que el fuego se reinicie, las Fuerzas Militares siguen adelantando labores de monitoreos.
Las descargas de agua realizadas desde las aeronaves de la Fuerza Aeroespacial y los trabajos de sofocación y control realizados por soldados del Ejército Nacional aportaron en la mitigación de los incendios, asimismo en la defensa de la vida y protección del medio ambiente.
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“Las altas temperaturas y los fuertes vientos han afectado más de siete mil hectáreas de capa vegetal. Los esfuerzos no se han detenido y nuestros uniformados, organismos de socorro, autoridades locales y aeronaves trabajan sin descanso”, señaló las Fuerzas Militares en su cuenta de X.
Desde el inicio del incendio forestal, los bomberos y autoridades locales asumieron de manera coordinada la lucha contra las llamas, que afectaron alrededor de 8.500 hectáreas.
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Con el fin de monitorear la zona, el personal continúa desplegado sus esfuerzos, para controlar los puntos calientes, y de esa forma prevenir que los focos retomen su fuerza.
Desde la Defensoría del Pueblo se hizo un llamado al Gobierno Petro, con el fin de que tome acciones efectivas en cuanto a la protección y conservación de los ecosistemas estratégicos que han sido afectados por las conflagraciones.
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