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El presidente Gustavo Petro presentó un plan de sustitución de cultivos ilícitos en el Catatumbo. La idea es pagar por la erradicación y de esta manera lograr sustituir 25.000 hectáreas en esa zona de frontera con Venezuela.
Al presentar el plan, el presidente Gustavo Petro dijo que “Muchas de las organizaciones sociales que presentó Alexander, el director del DNP, están permeadas por las armas, subordinadas a las armas. Aún así hay que quitarle la población a las armas, no se trata de quitarle recursos a las armas”.
Desde la Asociación Campesina del Catatumbo, ASCAMCAT, publicaron un comunicado en el que rechazaron las afirmaciones del presidente y le pidieron una rectificación.
“Señor presidente, como sujetos del cambio reconocidos en su plan de desarrollo, le pedimos rectificación de sus afirmaciones realizadas el día de ayer en el consejo de ministros televisado, porque agudiza la estigmatización de nuestra organización campesina, suprime nuestras garantías para la participación política, profundiza las condiciones de riesgo e incrementa las dificultades para la concreción de los esfuerzos que hemos desplegado en esta ruta humanitaria que activamos”, se lee en el comunicado.
En el mismo sentido, proponen, como condición previa a la firma del pacto Catatumbo, la realización de un diálogo humanitario.
Según Ascamcat, este diálogo debe llevar a “Las garantías plenas de autonomía, participación, reconocimiento, retorno de líderes, firmantes de paz y comunidad en general que se encuentran en situación de desplazamiento”.
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