
Polémica por plata de la JEP para obra de teatro: habla el actor Fabio Rubiano
La obra financiada por la JEP busca promover la comprensión social sobre la labor del tribunal, creado tras el proceso de paz con las Farc.

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La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP)ha sido objeto de controversia tras conocerse que destinó $197 millones para la producción de una obra de teatro con la compañía Teatro Petra, dirigida por los actores Fabio Rubiano y Marcela Valencia.
La noticia generó debate público, especialmente por las dificultades presupuestarias que la JEP ha denunciado en meses recientes. Según el documento que dio origen a la polémica, el contrato tenía como objetivo realizar “acciones comunicativas que permitan, a través del arte dramático, generar la comprensión social de los desafíos misionales de la JEP”.
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Es decir, se trató de una estrategia de difusión sobre el papel de la justicia transicional en Colombia. La controversia escaló luego de conocerse que, en promedio, cada actor habría recibido $13 millones por ocho funciones, lo que generó críticas sobre el destino de los fondos públicos y la pertinencia del gasto en un contexto de restricciones financieras.
En entrevista con Mañanas Blu, el director Fabio Rubiano defendió la iniciativa y desmintió las afirmaciones sobre la cantidad de dinero que él personalmente recibió.
“No lo recibí yo, lo recibió el grupo y se dividió en investigación, ensayos, construcción de escenografía, iluminación, sonido y alquiler del espacio”, explicó. Rubiano también enfatizó que el Teatro Petra no tiene afiliaciones políticas y que su trabajo no responde a intereses partidistas.
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“El teatro es un hecho político, pero no partidista. En nuestra compañía hay personas de diferentes tendencias políticas”, aclaró. El actor detalló que la obra, titulada "Mantener el juicio", busca representar el proceso de reconciliación en Colombia a través de personajes ficticios basados en hechos reales.
“Todos los personajes tienen contradicciones, incluidos los magistrados, que en la obra se preguntan: ‘¿Y qué tal que esto no sirva para nada?’”, comentó Rubiano.
El contenido de la obra presenta situaciones que reflejan la complejidad del conflicto colombiano. Rubiano compartió un fragmento significativo de la historia: “En un momento, el personaje de doña Rosalba, cuyo esposo fue secuestrado por la guerrilla durante cinco años, se enfrenta a su captor y le dice: ‘No lo voy a perdonar, usted me da asco’”.
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Además, la puesta en escena aborda el tema de los falsos positivos y el proceso de verdad y reparación. “Una mujer que perdió a su hijo en un caso de falsos positivos se encuentra con el militar responsable. La obra no dicta sentencia, deja que el público reflexione”, explicó.
Uno de los puntos de crítica ha sido el mecanismo mediante el cual la JEP entregó los recursos. Rubiano explicó que no se trató de una licitación, sino de una alianza, en la que el Teatro Petra también aportó recursos.
“Nosotros pusimos más plata que la JEP, cerca de $240 millones”, señaló.El director detalló que este tipo de acuerdos son habituales en el sector cultural y que los aportes incluyen el valor del trabajo de los actores, la dirección, la escritura y el alquiler del teatro.
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A pesar de la controversia, la obra ha recibido una acogida positiva. Según Rubiano, “las víctimas que la han visto nos han agradecido por visibilizar su historia”. Además, tras el revuelo mediático, se está considerando extender la temporada y realizar una gira nacional.
Finalmente, el actor expresó su descontento con el debate generado: “Aquí se critica sin ver la obra, sin leer el documento, sin estudiar nada. Se nos señala porque el teatro se llama Petra y porque el contrato lo hizo la JEP”.
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