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El presidente Gustavo Petro volvió a su municipio natal, Ciénaga de Oro, Córdoba, para formalizar la entrega de predios de la Sociedad de Activos Especiales, SAE, para la producción de proyectos campesinos.
Desde allí habló de buscar una ley de reconciliación nacional donde habrá un camino para que narcotraficantes, violentos e ilegales puedan tener un camino para vivir en la Nación.
“A esos narcotraficantes les decimos que hay otro camino, que a pesar de los insultos que recibo todo el día y todos los días, en donde me llaman loco, en donde creen que soy un corrupto como ellos, yo les digo: ‘¡No!’ También los narcotraficantes tienen aquí un camino”, sostuvo el presidente Petro.
“Se hará una ley de la reconciliación nacional para que todos aquellos y aquellas que hayan sido incursos en la ilicitud, en la violencia, puedan tener un camino y un vivir en esta Nación colombiana, una vez se deje de la mente, del cerebro, la idea de matar al compatriota, la idea de quitar y despojar al compatriota humilde”, agregó el presidente Petro.
Y agregó que “este Gobierno va a hablar, pero ese hablar no consiste en arrodillarse, en dejarse cooptar, en prácticamente ponerse a temblar porque le ofrecen un vaso de whisky con hielo en un club privado muy famoso. Este Gobierno va a hablar”.
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