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Jair y su esposa, ambos excombatientes y quienes pidieron no revelar su identidad por el asesinato selectivo en los últimos meses a personas que dejaron grupos armados al margen de la ley, salieron adelante luego de empuñar las armas durante varios años abriendo una clínica veterinaria en Caldas.
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La esposa de Jair es veterinaria y él técnico agropecuario. Con sus conocimientos, esta pareja decidió abrir la clínica para animales hace 8 meses.
Según contó Jair en Mañanas BLU, el acompañamiento de la familia para liderar este tipo de proyectos es fundamental.
Lea también: Más de 130 excombatientes en Colombia obtuvieron título en servicios de salud"También tocó hacer unos préstamos porque teníamos ganas de montar eso. Los primeros seis meses son para darse a conocer", contó Jair a BLU Radio.
Sobre la relación de ambos con los amos de las mascotas, Jair expresó que es buena y que hay que aprender a hablarles.
"A los clientes hay que saberles hablar y explicarles las cosas", enfatizó el excombatiente.
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Escuche aquí la entrevista completa con el excombatiente Jair, dueño de una clínica veterinaria en Caldas:
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