El Hospital Piloto de Jamundí, en el Valle del Cauca, denunció que presuntos hombres armados devolvieron una misión médica que iba a brindar servicios de salud a una comunidad en el corregimiento de Villa Colombia.
A través de un comunicado, el Hospital Piloto de Jamundí informó que la gerente encargada pidió respeto por la misión médica, que fue atemorizada, amedrentada y expulsada del territorio por personas desconocidas que, aparentemente, estarían armadas.
Sobre este complejo panorama de orden público en el occidente del país se pronunció el ministro de Defensa, Guillermo Botero, quien dijo que en todo el departamento hay presencia militar para atender las situaciones que se presenten.
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“Tenemos presencia militar prácticamente en todo el departamento, hemos tenido situaciones difíciles como el asesinato de un soldado en Suarez, pero continúa la presencia de la fuerza pública”, indicó.
Aunque la misión médica iba debidamente identificada, finalmente no pudieron llegar al corregimiento de Santa Rosa, en el Valle, para atender a la comunidad. Estos servicios de salud son protegidos por el Derecho Internacional Humanitario y están amparados por los convenios de Ginebra.
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