El Ministerio Público anunció que revisará la actuación del ICBF desde hace 22 meses, cuando la menor de tres años que esta semana fue torturada y abusada en el barrio Santa Fe, en Bogotá, fue sacada de la casa de su abuela, a pocos días de que le otorgaran la custodia a la mujer.
El ente de control revisará las actuaciones desplegadas por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar desde el 12 de julio de 2016, cuando le fue reportado que la mamá de la niña, entonces menor de edad y de quien se sospechaba que era víctima de explotación sexual, se la llevó de la casa de la abuela materna en Yopal, Casanare, pese a no tener su custodia.
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La Procuraduría advierte que se revisarán los procedimientos desplegados por el ICBF desde el pasado lunes 30 de abril, cuando una patrullera de la Policía de Infancia y Adolescencia reportó la situación de abandono de la niña, quien fue llevada por un desconocido al Hospital El Guavio, donde recibió atención inicial en la sala de reanimación.
“La Procuraduría busca establecer por qué este caso no le fue reportado de manera inmediata y qué acciones tomó el instituto para proteger los derechos de la niña desde que fue llevada al hospital”, dijo el procurador General de la Nación, Fernando Carrillo.
Finalmente, por los hechos se ordenó la creación de dos agencias especiales para que representen a la pequeña en los procesos penales y administrativos para el restablecimiento pleno de sus derechos.
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Carrillo fue enfático en decir que el hecho podría tipificarse como una tentativa de feminicidio. La pequeña se mantiene en el hospital Santa Clara por cuenta de sus brutales agresiones.
