Cerca de 600 niños del corregimiento El Orejero, en Sucre, acuden en canoas a sus colegios para recibir las clases en medio de las inundaciones ocasionadas por el desbordamiento del río Cauca.
"Nosotros como padres de familia estamos preocupados porque ya hace años que tenemos esta situación. El colegio se inunda y exponemos a nuestros hijos a mosquitos o una culebra y nadie nos responde", dijo a Noticias Caracol Diana Contreras, una de las madres de familia afectadas.
En la institución educativa José Ignacio López, los niños deben recibir sus clases con los pies sobre las silla o dentro del agua debido, precisamente, a esas inundaciones.
"Muchos no tienen cómo llegar a la institución, porque no tienen un bote. Además hay brotes de rasquiña por las aguas estancadas y contaminadas que han llegado a la población. El acueducto colapsó por la ola invernal", dijo otro de los afectados.
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