Fernando Marín, el empresario santandereano señalado de lavado de activos

Fernando Marín Valencia es un ingeniero civil graduado con honores de la Universidad Industrial de Santander en 1978. Su carrera en el sector inmobiliario comenzó en 1976 cuando fundó, junto a su hermano Rafael Marín Valencia, la constructora Marval, hoy en día una de las empresas más importantes del país en su género.Marín Valencia siempre ha estado ligado con la política, su padre Alfonso Marín Morales, fue un político y gran defensor de la ideología conservadora en los años 50 y 60. Fernando Marín es un reconocido conservador en Santander.En el gobierno de Andrés Pastrana, luego de hacerle fuerza política en el departamento, Fernando Marín fue nombrado como miembro de la junta directiva de Ecopetrol y embajador de Colombia en Malasia, Tailandia y Vietnam.Vea también: Cerca de 6 billones de pesos incautados en lavado de activos en el país También, durante el gobierno de Álvaro Uribe dirigió las embajadas de Venezuela, Surinam y Guyana.En los conservadores santandereanos, la noticia de que la Fiscalía le imputará cargos a Fernando por lavado de activos, ha caído como un baldado de agua fría.“Me resisto a creer que Fernando Marín, una figura muy respetable de la sociedad santandereana, pueda estar involucrado en delitos de esa naturaleza, cuando su trayectoria empresarial ha sido siempre impecable, habrá que esperar qué decide la justicia”, dijo Rafael Serrano Prada, presidente del Partido Conservador en Santander.Por su parte, el historiador y sociólogo Julio Acelas, es enfático en decir que la corrupción toca hasta las figuras más respetables.“Esto es gravísimo, lo que pasa es que la corrupción no solo es de los políticos, la ilegalidad también se da en el sector privado y muchos empresarios interactúan y han hecho sus fortunas con lo público y este señor Fernando Marín podría ser un claro ejemplo de esto”, afirmó.La Fiscalía informó que el próximo 13 de marzo, Marín Valencia será imputado por el delito de lavado de activos, esto porque supuestamente habría ayudado a lavar dineros del escándalo del ‘carrusel de la contratación’.