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Carlos Marti, de la Veeduría Colombia Transparente, que hace seguimiento al PAE en Santander, aseguró que en el año 2018 hicieron las denuncias ante los organismos de control porque había rumores sobre la utilización de carne de caballo en la comida que se le entregaba a los estudiantes que se beneficiaban del PAE, sin embargo, en ese momento “no pasó nada”.
“En el momento hicimos las denuncias porque nos llegó información de una persona cercana a un operador que dijo que estaban entregando carne de caballo e hicimos una prueba en Barichara con las veedurías de allá y resultó positivo. Enviamos la queja a la Fiscalía, a la Procuraduría y a la Secretaria de Educación, pero no pasó nada y creímos que no iba pasar hasta ahora sale a luz pública”, explicó Marti.
Dice que es importante revisar el avance de la investigación de la Fiscalía y determinar exactamente dónde se vendió la carne de caballo y de burro y a qué operadores.
“Esto para establecer también en qué colegios fue entregada la carne, pero lo que si es cuestionable el tiempo que demoraron las autoridades para darle trámite a este tipo de denuncias”.
El docente Alejandro Arenas, quien hizo control al programa de Alimentación Escolar en el municipio de Barbosa, también denunció, en su momento, la mala calidad de los alimentos que llegaban del PAE.
“En muchos casos la carne llegaba muy dura y era una expresión frecuente de las manipuladoras de los alimentos que debían prepararla con más cuidado, partirla en cuadros para tratar de hacerla más blanda para los niños”, manifestó.
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