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Policía interviene caño de la sexta, nueva guarida del microtráfico en Bogotá

Tras la intervención del Bronx, este sitio se ha convertido en uno de los nuevos expendios de droga de la capital.

302595_Foto: caño de la calle sexta/Alcaldía
Foto: caño de la calle sexta/Alcaldía

Centenares de habitantes de calle encontraron en el caño de la calle sexta con carrera 30, en Bogotá, un nuevo escenario para habitar, tras el cierre del antiguo Bronx en San Bernardo, centro de la ciudad. 

En operativos adelantados diariamente por la Policía Metropolitana y autoridades del Distrito, se encontró una nueva guarida de delincuencia en el sector, rodeado de una zona industrial. Entre olores a excremento, basuras, mezclas de residuos orgánicos y animales, habitantes de calle que se han desplazado desde diferentes lugares de Bogotá permanecen en el profundo caño, donde bajo puentes peatonales arman sus cambuches y pernoctan con mascotas mientras se resguardan del frío con cartón y papel periódico. 

Sin embargo, además de la habitabilidad de estos individuos, se ha establecido la presencia de expendedores de droga que utilizan a los mismos habitantes de calle para comercializar papeletas de marihuana y bazuco que, se presume, serían los mismo que integraban las temidas bandas del

Bronx, dentro de ellos ‘Los Sayayines’. 

Vea aquí: Capturan 14 personas y derriban casas en operativo contra microtráfico en Rionegro

En las últimas horas fueron realizadas algunas capturas en el sector, de que serían los encargados de ser ‘los ganchos’ en esas estructuras criminales.

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A pesar de que la Fiscalía adelanta las investigaciones, se presume que dentro de los dealers podría estar alias ‘Homero’ y alias ‘Gancho Manguera’, que serían algunos de los enlaces para la distribución de drogas.

En los operativos que adelantan casi que diariamente junto al Distrito, los habitantes de calle son alertados de forma previa y, al ver a los oficiales y el personal de atención, se diseminan por los barrios aledaños casi que de inmediato, para horas después volver al lugar donde, además, atemorizan a transeúntes, conductores y comerciantes.

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