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"Perder dos finales es un fracaso. Hay que aceptar el momento, curando las heridas en casa", declaró un serio Simeone en la conferencia de prensa posterior al partido en San Siro.
"Es difícil decir qué pasó. Dejadme un tiempo para pensar qué pasó. Dejadme analizar con frialdad, no tan rápido. Es muy justo ahora para opinar tan rápido", apuntó.
Por sus palabras, algunos interpretaron una insinuación de que se estaría plantando su continuidad en el equipo, algo que él, críptico, no terminó de aclarar.
"Me estoy planteando pensar", se limitó a responder cuando le preguntaron directamente sobre si se está pensando abandonar el equipo, al que llegó en los últimos días de 2011 cuando estaba en una crisis importante y al que ha elevado a un lugar protagonista en Europa.
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"Soy de guardarme pocas cosas y me sale esta sensación", dijo en otra de sus respuestas, al ser preguntado sobre su futuro, insistiendo en que debía "pensar" sobre lo ocurrido en el partido de este sábado.
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"No sé qué duele más. Duele ver a la gente que pagó la entrada, que viajó, que se entusiasmó. Yo como cabeza responsable no les puedo dar lo que quería y eso duele más que cualquier situación", afirmó, en todo momento con gesto muy serio.
Simeone quiso, eso sí, rendir homenaje al esfuerzo de sus hombres.
"Estoy orgulloso de mis futbolistas. Han hecho un esfuerzo extraordinario. En una Champions durísima para nosotros, en la que jugamos contra el Barcelona, el Bayern... En la que hoy empezamos perdiendo, fallamos un penal y nos repusimos luego. A los jugadores los quiero muchísimo. Han dado y dan lo máximo que tienen en cada pelota", subrayó.
Simeone, pese a la visible decepción, fue elegante en la derrota y felicitó a los campeones.
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"El que gana siempre es mejor. El Madrid fue mejor porque ganó y nosotros no pudimos resolver en la tanda de penales la posibilidad de ser campeones", lamentó.
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"La única manera de seguir insistiendo es trabajando. Es momento para pensar de parte mía y en qué momento estoy", apuntó, en otro mensaje que disparó la incertidumbre sobre si Simeone está pensando en un cambio de aires o simplemente hablaba por él el gran disgusto que acababa de vivir.
Simeone también tuvo palabras de aplauso para su homólogo en el banquillo blanco, el francés Zinedine Zidane.
"Zidane tuvo la fortuna de entrenar a uno de los mejores tres equipos del mundo, junto a Bayern y Barcelona. Siempre salir campeón te posiciona en un lugar privilegiado", afirmó.
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Simeone tendrá que seguir esperando para seguir los pasos de sus compatriotas Luis Carniglia (Real Madrid en 1958 y 1959) y Helenio Herrera (Inter de Milán en 1964 y 1965), los únicos técnicos no europeos que han conseguido proclamarse campeones de Europa.
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