El magistrado Gustavo Malo, acusado de liderar una red de corrupción judicial denominada el cartel de la toga, recibió una nueva sanción.
La Dirección Ejecutiva de Administración de la Judicatura decidió que no se le pagará más su sueldo que en promedio es de 33 millones de pesos mensuales.
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Desde ahora, al magistrado solo se le consignarán los aportes sociales de salud y pensión.
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La determinación se da luego de que la sala plena de la Corte Suprema de Justicia sancionara a Malo separándolo de sus funciones para que no recibiera más procesos en su despacho mientras se adelanta el proceso en su contra.
La dirección administrativa de la Judicatura se basó en los argumentos de la decisión se basan en el Decreto 1083 de 2015 que en uno de sus artículos establece que el pago de remuneraciones a servidores públicos debe corresponder solo a los servicios efectivamente prestados.
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