El drama de los 46 colombianos capturados en China desde hace un mes
Entre los retenidos se encuentra una antioqueña. Su familia denuncia que se encuentra en condiciones precarias.
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La situación de estos colombianos radicados en Guangzhou, una ciudad al sur de China, comenzó el pasado 28 de enero. Un grupo de extranjeros se encontraban en el Bar 99, en una zona de discotecas colombianas cuando agentes de la Policía de Beijín llegaron hasta el lugar en un operativo que buscaba, al parecer, capturar a una mujer que sería responsable de un robo de 250 mil dólares denunciado por un ciudadano árabe.
Según narró una colombiana radicada en ese país asiático y que presenció el momento de la captura, el operativo ocurrió hacia las 4:00 de la madrugada cuando varios policías llegaron en camiones escolares, ordenaron apagar la música y separar hombres y mujeres.
De acuerdo con lo que contó la mujer, durante el procedimiento fueron capturados hombres, mujeres, comerciantes y hasta personas que tenían sus papeles en orden. Horas después dos embarazadas fueron dejadas en libertad.
Entre las capturadas se encuentra Leidy Vanessa García, una antioqueña, de 19 años, que había viajado a ese país en 2017 para buscar un mejor futuro. Según cuenta su madre, Doraluz Betancur, quien vive en Bello, luego de la retención recibió una llamada de su hija, pero no le contó detalles. Ella aún no se explica por qué su hija fue capturada, pues tenía todos los documentos en regla y aseguró que en el centro de detención sólo les dan de comer pan y agua.
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El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia informó que ha mantenido constante comunicación con las autoridades chinas con el fin de hacer seguimiento al estado de salud, ubicación y estado legal de los colombianos.