Los detalles de la nueva solicitud de la ANLA a Hidroituango
La entidad, en los últimos días, pidió una serie de informes sobre posibles sismos y el estado del vertedero en la actualidad.
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La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, ANLA, sesionó en los últimos días en una reunión conjunta con los representantes de Hidroituango para revisar el cumplimiento de solicitudes anteriores y pedir nueva información sobre el estado de la central hidroeléctrica más importante del país.
Se trata de una lista de 28 puntos en los que la ANLA insiste en solicitar información sobre hechos que podrían generar una catástrofe en los municipios abajo del río Cauca. En el punto dos, la ANLA pide información sobre posibles avalanchas en el río en el área de influencia del proyecto considerando escenarios como sismos fuertes.
La empresa contestó en la reunión que “la información se radicó a inicios de diciembre, por lo que no se encuentra dentro de la información para el periodo objeto de seguimiento. Se mantiene el requerimiento”. Esto quiere decir que aún Hidroituango no cuenta con información sobre lo que podría ocurrir en caso de un evento sísmico que afectara la infraestructura de la central.
El punto cuatro del documento son las solicitudes tiene que ver con el informe que entregue Hidroituango para conocer las causas de la emergencia que se dio en abril de 2018. La empresa contestó que la firma contratada para tal fin aún no ha entregado la investigación y la fecha para presentar las conclusiones solo se conocerá hasta el 30 de enero.
El punto cinco se relaciona con una exposición de las alternativas para la evacuación de las aguas del río Cauca que no sea la de la utilización del vertedero, con un análisis consecuente sobre los desenlaces para la población abajo del sitio de la presa.
Hidroituangocontestó que hasta el momento “no existe maniobra técnica para cumplir con esta obligación”.
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“Actualmente se está revisando si hay tecnología para realizar maniobras debajo de agua, pero a la fecha no se tiene una actividad definida hasta tanto no se tenga certeza sobre el estado de casa de máquinas”, dice el acta.
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En otro de los puntos del documento, la ANLA le pide información a la empresa sobre los posibles efectos ambientales generados a partir de la sedimentación en las zonas de conducción de agua. Hidroituango contestó que hasta ahora tampoco se ha podido evaluar esa consecuencia para las aguas del río.
“Los equipos no han podido determinar los materiales que están dentro del GAD, así como tampoco el tipo de obstrucción que tiene el túnel derecho”, añadió.
Más adelante, la ANLA le pide a Hidroituango información relevante sobre individuos rescatados, reubicados y muertos de fauna íctica, es decir, peces en esa zona específica de la región. Desde el proyecto respondieron que hubo un error en el informe presentado sobre ese fenómeno.
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Finalmente, la ANLA solicitó información sobre las afectaciones sociales que ya se dieron en las poblaciones aledañas a las obras y especialmente sobre la interrupción de las clases y los problemas para los habitantes de Valdivia.
Hidroituango deberá contestar la lista con los 28 requerimientos en los próximos días, aunque lo más importante es el informe de la firma contratada para determinar las causas del origen de los hechos.
Un profesor de la Universidad Nacional señaló que parte de la emergencia se dio debido a la aceleración de las obras para cumplir con la fecha de entrega que inicialmente era diciembre de 2018.
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