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El arroyo Hospital, que atraviesa barrios del centro y suroriente de Barranquilla, nuevamente mostró su furia con el regreso de las lluvias a la capital del Atlántico. Aunque han avanzado los trabajos de canalización, en algunos sectores de Rebolo las torrenciales aguas por poco arrastran a un niño de dos años.
Según reportó el capitán Jaime Pérez, comandante del cuerpo de bomberos de Barranquilla, el menor logró ser rescatado de este caudaloso arroyo que inundó varias viviendas y socavó andenes, lo que obligó a la comunidad a salir con sus enseres a la calle, en medio de la cuarentena.
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Otras corrientes de agua en la ciudad también arrastraron varios vehículos. Mientras que los fuertes vientos que se registraron, sobre todo en el barrio La Victoria y otros sectores del suroccidente de la ciudad, destecharon casas y arrancaron árboles de raíz, que quedaron tendidos en las vías.
En el área metropolitana se reportaron inundaciones por cuenta del desbordamiento del arroyo El Platanal, uno de los más caudalosos del municipio de Soledad. Las aguas inundaron el bulevar de Simón Bolívar y paralizaron el tráfico en esta zona.
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Vale decir que, nuevamente, por la cantidad de basuras arrastradas por los arroyos hacia la zona de captación del acueducto en el río Magdalena, la empresa Triple A suspendió el servicio de agua potable en varios sectores de Barranquilla y Soledad de manera preventiva.
A esta hora, los organismos de socorro adelantan un recorrido por la ciudad para cuantificar daños y brindar ayuda a las familias afectadas.