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En medio de la racha sicarial que dejó cuatro muertos en menos de 10 horas en Cartagena , las autoridades confirmaron el homicidio de Sebastian Blanco Guerrero, un joven de 19 años, que recibió varios impactos de bala a las afueras de una discoteca en el barrio Santa Mónica, en el sur de la ciudad.
La víctima, que de acuerdo al reporte de la Policía Metropolitana de Cartagena, registra cuatro anotaciones judiciales por delitos como tráfico de estupefacientes, homicidio, hurto, y falsedad personal; había sobrevivido en septiembre de 2024 a un atentado cuando se encontraba como pasajero, al interior de un vehículo en la vía La Cordialidad. En ese momento él y su acompañante, fueron trasladados a centros asistenciales, donde se recuperaron de las lesiones.
Sin embargo, en esta ocasión sobre las 3:40 de la madrugada del miércoles 29 de enero, Blanco Guerrero se convirtió en la cuarta víctima de una racha de sicariatos dejó tres muertos más en los barrios Olaya Herrera, Paseo Bolívar, y el sector de La Pajarera.
“Esta persona se encontraba en la parte externa de un establecimiento abierto al público, fue lesionado con arma de fuego, posteriormente es trasladado a un centro de salud cercano, donde momentos después fallece por las lesiones”, detalló la Policía en su informe sobre el ataque sicarial a Blanco Guerrero.
Hasta el momento se han entregado más detalles o hipótesis sobre esta muerte.
En lo corrido del año en la ciudad de Cartagena se han registrado 29 homicidios , de los cuales 19 corresponden a sicaritos.
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