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Benildo Estupiñán, gobernador encargado de Nariño, informó que, a la fecha, 25 de los 64 municipios del departamento reportan desabastecimiento de agua potable debido a la sequía, lo que hace necesaria la ayuda de la Dirección Nacional para la Atención del Riesgo.
En diálogo con Blu Radio, el funcionario dijo que el panorama es desolador en los municipios de las zonas sur, norte, pacífico y la región del Telembí, donde, de acuerdo con los organismos de socorro, el cauce de los ríos que abastecen las plantas de tratamiento de los acueductos ha disminuido entre un 60 % y 70 %.
Estupiñán aseguró que, por directriz del gobernador titular, Luis Alfonso Escobar, a través de la Dirección Regional para la Atención del Riesgo, se han atendido las solicitudes de varios alcaldes, pero el departamento no cuenta con los recursos necesarios para afrontar esta emergencia.
El mandatario seccional, en calidad de encargado, dijo que “la sequía prolongada en Nariño ha desencadenado incendios forestales que arrasaron con más de 860 hectáreas de vegetación, afectando principalmente a los municipios de Mallama, Chachagüí y Pasto".
Ante la gravedad de la emergencia, la Dirección Departamental de Gestión del Riesgo activó un Puesto de Mando Unificado (PMU) para coordinar las acciones de respuesta con instituciones municipales, departamentales y nacionales.
No obstante, la falta de recursos y el escaso compromiso de algunas alcaldías han dificultado las labores de extinción en las comunidades afectadas.
Además, la sequía ha provocado una crisis de agua sin precedentes en los últimos diez años en al menos 25 municipios del departamento. Ríos como el Telembí han alcanzado sus niveles más bajos en la historia, poniendo en riesgo el suministro de agua potable para miles de personas.
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En municipios como Taminango y El Peñol, las fuentes hídricas se han secado casi por completo, lo que ha obligado a las autoridades a implementar medidas de emergencia, que incluyen el suministro de motobombas y la distribución de agua potable, afirmó el secretario de Gobierno, en calidad de gobernador encargado.
Durante la instalación del Puesto de Mando Unificado (PMU), delegados de la Procuraduría General de la Nación anunciaron su intervención para asegurar que los recursos destinados a esta emergencia se utilicen de forma eficiente y transparente, e iniciaron procesos sancionatorios para las alcaldías que no han cumplido con sus responsabilidades.
En respuesta a la crisis, el Gobierno departamental capacitará al personal del Ejército Nacional y la Policía Nacional para apoyar en las tareas de extinción de incendios.
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Por su parte, las autoridades y organismos de socorro advirtieron que la situación podría empeorar, ya que las lluvias solo se esperan hasta mediados de octubre, por ello, se hace un llamado a la comunidad para activar todas las acciones que permitan prevenir incendios y denunciar cualquier acto de vandalismo o negligencia que pueda empeorar la situación.
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