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Enfermo terminal de cáncer pide entrar en la cárcel para no estar solo

El hombre, padre de cinco hijos a quienes no ve desde hace meses, pasó dos años en prisión en su juventud debido a problemas relacionados con las drogas. No obstante, hoy asegura estar "limpio" desde hace más de tres décadas y, aunque desearía ingresar en prisión, no tiene intenciones de volver a cometer actos delictivos.

Justo Márquez
Justo Márquez
Foto: El Español

En un conmovedor gesto, Justo Márquez, un ciudadano de 60 años oriundo de Granada, España, y afectado por una enfermedad decáncer, expresó su deseo de ingresar de manera voluntaria en el complejo penitenciario de Alhaurín de la Torre, en Málaga. Su motivación principal radica en el temor de "estar solo" debido a su delicado estado de salud. Considera que en la cárcel podría contar con la compañía de otros reclusos que podrían "brindarle atención y apoyo".

Además de su diagnóstico de cáncer, Márquez enfrenta también problemas cardíacos, depresión y ansiedad, revelan medios españoles. En diversas ocasiones, ha sido derivado a los servicios de salud mental, donde la respuesta recurrente ha sido "visite a su médico de cabecera" y "se le recetarán nuevos tratamientos". Este constante rechazo por parte de los servicios sociales y sanitarios lo hace sentir "desamparado".

Márquez está viviendo una situación desgarradora. Se siente "abandonado" por todas partes y su anhelo más profundo es dejar de estar "solo las 24 horas del día". Con un cartel que reza "Quiero ir a la cárcel", se presentó el pasado lunes ante las puertas de la prisión de Alhaurín de la Torre, expresando su deseo de ingresar voluntariamente. Ha decidido mantener su protesta hasta que se resuelva su situación.

No encuentro ayuda por ninguna parte y entrar en la cárcel es la idea que he tenido, pero no quiero cometer ningún delito
afirma Márquez

Justo Márquez
Justo Márquez
Foto: EFE

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El director de la prisión de Alhaurín de la Torre tuvo un encuentro con Márquez este lunes y, lamentablemente, lenegó la posibilidad de ingresar voluntariamente en la cárcel sin haber cometido un delito.

Este granadino, padre de cinco hijos a quienes no ve desde hace meses, pasó dos años en prisión en su juventud debido a problemas relacionados con las drogas. No obstante, hoy asegura estar "limpio" desde hace más de tres décadas y, aunque desearía ingresar en prisión, no tiene intenciones de volver a cometer actos delictivos.

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