Liberan a ingeniero secuestrado en Marialabaja, tras haber sido engañado con un trabajo

Tras seis horas de permanecer en manos de dos secuestradores armados, el ingeniero Luis Fernando Zuluaga fue liberado en zona rural del municipio de Marialabaja, Bolívar, gracias a la presión del Ejército y la Policía, que hicieron un barrido en el área luego de conocer la denuncia. El caso ocurrió este martes después de que Zuluaga saliera de su casa en Barranquilla a bordo de su camioneta rumbo a Marialabaja. En esa población debía encontrarse con un supuesto cliente que requería sus servicios y los de su esposa, una reconocida arquitecta de Barranquilla, para remodelar una finca.Según Diana Escorcia, esposa de Zuluaga y diseñadora de La Ventana al Mundo, ícono de Barranquilla, el acuerdo era que un trabajador del supuesto cliente esperaría a su esposo antes de llegar a la finca para llevarlo por el camino correcto. "El tipo se subió al vehículo y llevó a Luis hasta donde lo esperaba un hombre armado. Lo obligaron a bajar y lo hicieron caminar por el monte. Por fortuna, a él se le ocurrió hacerse el cojo y de esta manera los retardó un poco para que no se alejaran tanto de la zona donde había quedado el carro", explicó la arquitecta, quien denunció el hecho en sus redes sociales.Lea también: Hombre se autosecuestró y cobraba $15 millones de rescate a su hermanoDiana recibió en su celular una llamada de los secuestradores en la que le exigían 50 millones de pesos para no cortarle un brazo a su marido o matarlo. Sin embargo, después de mucho pensarlo y en medio de la angustia, decidió comunicarse con el Gaula del Ejército."Los tipos se identificaron como del Clan del Golfo, pero creo que las autoridades no le dan crédito a esa versión", dijo la esposa.Ejército y Policía actuaron de manera conjunta acordonando el área donde fue abandonada la camioneta del ingeniero y empezaron a llamarlo con altoparlantes. Esta situación asustó a los secuestradores, quienes huyeron del lugar dejándolo libre."El mensaje que queremos enviar es a las personas que trabajan como nosotros, ingenieros y arquitectos, para que tengan mucho cuidado cuando aparezcan clientes con estas características. Nosotros somos muy cuidadosos y fuimos engañados. Por fortuna Luis ya está en casa", expresó Escorcia.