En Puerto Wilches, Santander, un grupo de pescadores rescató y devolvió a aguas profundas a varios manatíes que se habían quedado varados en una ciénaga. Estos mamíferos llevan generaciones conviviendo con los pescadores locales, y actualmente enfrentan serios riesgos debido a la sedimentación y contaminación del agua.
Durante la temporada de sequía, el nivel del agua en la ciénaga disminuyó drásticamente, dejando varado a un manatí macho de tres metros de largo y aproximadamente 550 kilos. Gracias a la pronta acción y colaboración de pescadores y habitantes de la ciénaga, siete manatíes fueron rescatados y trasladados con éxito a zonas de mayor profundidad. El rescate de los manatíes quedó registrado en videos de personas que presenciaron la acción.
Sin embargo, la especie continúa en peligro de extinción debido al uso de trasmallos ilegales y la falta de un plan de preservación eficaz. Aunque en esta ocasión los manatíes fueron salvados con la ayuda de los habitantes del caserío El Cerrito, en 2023 murieron tres ejemplares.
Los manatíes habitan en aguas cálidas y suelen alimentarse principalmente de plantas y algas, además son conocidos por su naturaleza tranquila.
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A pesar de su tamaño, estos animales son vulnerables. Entre las amenazas que enfrentan se encuentran la pérdida de hábitat, la contaminación del agua, el tráfico de embarcaciones y la pesca ilegal con trasmallos. La sedimentación y la destrucción de las zonas de vegetación acuática generan afectaciones en su supervivencia.
Dentro de los esfuerzos para ayudar en su preservación se encuentran la creación de áreas protegidas, y la regulación de actividades de pesca.
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