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Una nueva emergencia humanitaria se registra en las comunidades indígenas de siete veredas, ubicadas a casi tres días de camino de la cabecera municipal de Dabeiba, desde donde comenzaron a desplazarse paulatinamente hace cinco días hacia el resguardo de Pueblo Nuevo.
Según el censo de las autoridades, en ese sector llegaron 286 familias indígenas, conformadas por 984 personas, y se encuentran en confinamiento.
El director de la Unidad de Víctimas de Antioquia, Wilson Córdoba, aseguró que estas familias indígenas se encuentran resguardadas por temor a ser víctimas del accionar violento.
"Las minas antipersonas en sus caminos no les han permitido a ellos trabajar la tierra y sus proyectos; y sobre todo las amenazas que tienen de los grupos al margen de la ley, por lo que todos se desplazaron a un sitio desde las siete veredas", agregó el funcionario.
Estas comunidades indígenas ya no tenían alimentos, por lo que la Unidad de Víctimas y con ayuda de un cooperante empezaron a entregar trece toneladas de ayudas humanitarias en 26 vuelos en helicópteros.
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