Así como condenamos el abuso policial, también rechazamos el vandalismo: Claudia López

La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, condenó el vandalismo que se presentó la noche de este miércoles en varias zonas de la ciudad en medio de las protestas y manifestaciones por la muerte del abogado Javier Ordóñez, de 46 años de edad, a manos de uniformados de la Policía Nacional.La mandataria, a través de su cuenta de Twitter, hizo un llamado a la protesta pacífica y condenó la violencia y el vandalismo en algunos CAI de la ciudad, que fueron destrozados, atacados e, incluso, incendiados.“Así como condenamos el abuso policial, también condenamos la violencia y vandalismo por parte de algunos manifestantes. El abuso y la violencia no se soluciona con más violencia. Es en estos momentos donde debemos aferrarnos a la Constitución y movilización ciudadana pacífica”, sostuvo López en la red social.Varios CAI de Bogotá fueron vandalizados y destrozados por la multitud. El de La Gaitana, localidad de Suba, fue completamente incendiado por los manifestantes.Otros centros policiales de la capital que terminaron afectados por las duras y fuertes protestas fueron los de Suba Fontanar, Bosa-Libertad, Tintal, La Gaitana, Galán, Park Way y Villa Luz.Al grito de "asesinos, asesinos", cientos de personas, en su mayoría jóvenes, lanzaron piedras, pintura y otros objetos contra el CAI del barrio Villa Luz, occidente de Bogotá, al que estaban asignados los dos policías implicados en el hecho.Vea además: Seis heridos dejan fuertes protestas en Engativá por muerte de Javier Ordóñez Los manifestantes atravesaron ramas de árboles en la vía pública y algunos usaron las patinetas en las que llegaron hasta el lugar para golpear los vidrios del CAI, mientras un escuadrón antimotines intentaba poner orden en la situación.En medio de la agitación, fue incendiada una motocicleta y atacado un vehículo del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General, que es la encargada de esclarecer los hechos que condujeron a la muerte de Ordóñez. Los desórdenes obligaron a los comerciantes del barrio a cerrar sus negocios y la Policía envió el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) para restaurar el orden.