El gobernador electo de Nariño, Luis Alfonso Escobar, y los 64 alcaldes que conforman la geografía de Nariño, pidieron al gobierno nacional que en esta región es necesario territorializar la paz a través de esta figura que hace parte del Plan Nacional de Desarrollo ‘Colombia, Potencia Mundial de la Vida’.
La solicitud fue hecha al presidente Gustavo Petro en la pasada reunión en la cual el mandatario seccional de los nariñenses visitó al presidente de la República, Gustavo Petro, y, entre otros temas, dialogaron sobre la implementación de la Paz Total en el departamento.
La paz tiene que hacerse en el territorio, con la presencia integral del Estado porque considero que los territorios que más han sufrido los embates de la guerra han sido marginados y excluidos, y es por eso que no ha cesado el conflicto, lo cual ha permitido que lleguen las economías ilícitas
En lo que va corrido del 2023 en Nariño se han registrado más de 18 mil personas desplazadas y centenares más confinadas, razón por la cual es necesario que todos hagamos un frente común para que hechos como los antes mencionados no se repitan y lograr así prevenir más víctimas humanas, dijo Escobar.
Aseguró que se requiere de la presencia de los tres niveles del Gobierno para la transformación de los territorios más vulnerables y dijo que a través del diálogo con todos los actores del conflicto se podrá lograr la tranquilidad de la región”, precisó el Gobernador electo, Luis Alfonso Escobar.
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El mandatario electo dijo que le planteó al Presidente Gustavo Petro la necesidad de territorializar la paz por medio de un pacto territorial, figura que hace parte del Plan Nacional de Desarrollo ‘Colombia, Potencia Mundial de la Vida’.
“Eso significa que los ministerios no lleguen con su oferta por separado, sino que un departamento como Nariño, donde están focalizados los factores de la guerra y las economías ilegales, pueda ser transformado con la presencia integral del Estado”, señaló.
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El Gobernador electo que se reunió con los 64 alcaldes de la región se refirió a la posibilidad de establecer unos diálogos regionales de paz con los múltiples actores de la guerra presentes en el departamento, siempre y cuando el gobierno nacional autorice.
“En Nariño están presentes las disidencias, la Segunda Marquetalia, el ELN, entre otros actores del conflicto, además de consejos comunitarios, resguardos indígenas, juntas de acción comunal y la sociedad civil en general; por eso, es necesario territorializar la paz y reducir las desigualdades para proyectar al departamento con todas sus potencialidades”, aseguró.
Según el mandatario electo, los diálogos regionales podrían iniciar una vez él tome posesión como Gobernador de Nariño, en los territorios más afectados por el conflicto como la costa pacífica, la cordillera y la subregión de Abades.
“Lo que esperamos es transformar estas zonas donde están las economías ilegales a través de vías terciarias, acueductos urbanos y rurales, educación superior y todo lo que le quite espacio a la guerra”, comentó.
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