Mono araña apareció en un colegio de Cali y generó sorpresa en sus estudiantes

Con mucha curiosidad y sorpresa, los estudiantes de un colegio en el sur de Cali vieron cómo, entre brincos en ramas, un mono llegó a su institución educativa y causó revuelo en una clase.Se trata de un primate perteneciente a la especie de los ‘mono araña’ que es típico de la región amazónica y zonas selváticas del país. El animal llegó por sus propios medios escalando los muros la institución educativa Cañaveral donde lo cuidaron.Las directivas de la institución de inmediato llamaron a las autoridades y en pocos minutos llegaron técnicos de la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC) quienes lograron atender al animal.Lea también: Las cascadas del Pacífico que el conflicto armado escondió durante 10 añosSegún los funcionarios, esta especie ha venido siendo víctima del tráfico ilegal por muchos años. Tras varios análisis se pudo establecer que la especie era una hembra que tenía afinidad con los seres humanos, especialmente con las mujeres.“El animal fue encerrado en el laboratorio de química por el personal del colegio y procedimos a capturarlo. Aún desconocemos su procedencia y hasta el momento podemos clasificarlo en el género Ateles”, dijo Juan Fernando Ospina, zootecnista de la CVC. “Esta especie es producto del tráfico que alimenta el mercado negro, por lo cual hemos realizado el decomiso ya que no está en su zona de distribución”, afirmó.El primate también tenía una herida en una de sus manos, no obstante, no presentaba ninguna señal de maltrato o deterioro en su salud.La ‘mono araña’ fue guardada en un guacal por parte de los ambientalistas sin necesidad de forcejear por parte de profesionales en biología y zootecnia.Pasados varios minutos el animal fue trasladado al Centro de Educación Ambiental San Emigdio ubicado en Palmira, donde se tratará la lesión en su mano y se terminarán de realizar estudios.Directivos de CVC hicieron un llamado para que denuncien el tráfico ilegal de fauna o se abstenga de adquirir animales silvestres para cualquier fin.“Por cada ejemplar enjaulado o raptado hay diez que mueren mientras están en el proceso de captura, transporte o comercialización”, dijo un funcionario de la CVC.