Tras fuertes lluvias que se registraron a finales de noviembre en la zona rural del municipio de Cimitarra en Santander la tierra en la vereda La Jota se empezó a abrir.
El fenómeno ha ocasionado el colapso de 10 viviendas y otras ocho presentan daños por caída de muros.
La emergencia fue dada a conocer por el concejal de Cimitarra, Diego Galvis.
“No sabemos aún la causa de la emergencia, pero se dañaron 10 casas y en ocho se partieron paredes. Además, se dañaron 70 hectáreas de cultivos de aguacate, cacao y maderables”, señalo el concejal.
Agregó que, desde el 24 noviembre, día de la emergencia, se notificó a la Gobernación de Santander sin que hasta la fecha haya una atención al tema.
“El 24 que ocurre el evento logro ir con el personero del municipio a donde el secretario de Planeación municipal y a la zona de la emergencia, allí hacen un informe y lo envían a la gobernación de Santander. El día 25 de noviembre que se corre más la tierra vuelve la comisión de gestión del riesgo de la alcaldía al sitio, ellos informan a la Corporación Autónoma de Santander, CAS, y a la gobernación, pero hasta el día de hoy no ha habido una respuesta”, aseguró el concejal Galvis.
La emergencia también provocó el hundimiento y grandes grietas en las vías que comunican a la vereda La Jota con Altamira y Perdida Alta.
“En unos sectores se levantó la tierra 3 y 4 metros, en otras partes se hundió y también hay grandes grietas. Los habitantes solo pueden transitar en moto o a pie, inclusive los operarios de las antenas de telecomunicaciones que están ubicadas en la zona tienen que caminar hasta dos horas para atender los daños”, puntualizó.
Finalmente, hizo un llamado a las autoridades para determinar si las familias, alrededor de 80 que viven en la vereda La Jota, deben evacuar por el fenómeno que se presenta en los terrenos.