El Tigre Radamel Falcao volverá a cruzarse con Willy Caballero, que había detenido su penalti, uno de los momentos claves del Mónaco-Mánchester City, en el partido de vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones, el miércoles, después del triunfo inglés en la ida (5-3).
El penalti de Radamel Falcao detenido por Willy Caballero fue un hecho importante en el partido de ida. El guardameta relanzó las esperanzas de un City hasta ese momento dominado.
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El colombiano se redimió en parte marcando después con un bonito globo, engañando esta vez a Caballero.
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Caballero debe su titularidad a varios errores del guardameta número uno al inicio de la temporada, el chileno Claudio Bravo, fichado al Barcelona para el puesto de titular.
Aunque Guardiola confió el puesto al argentino desde enero, explica antes de cada partido que no sabe quién será titular en la portería el siguiente encuentro.
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El portero calvo respondió bien a la presión, encajando un solo gol en las cinco últimas jornadas de Premier League.
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La presión, Falcao no la teme, y lo muestra en esta temporada de su renacimiento tras dos años sin brillar en Inglaterra, en el Chelsea y en el Mánchester United.
Dejado en el banquillo para descansar el sábado contra Burdeos (2-1), solo entró en juego media hora, tiempo suficiente para ofrecer un pase decisivo a Kylian Mbappé. Recibió un golpe en la cadera, que no debería impedirle jugar.
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Con el polaco Kamil Glik suspendido, el brasileño Jemerson y el italiano Andrea Raggi deberían repartirse la vigilancia del goleador argentino del Mánchester City.
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Agüero tiene tendencia a irse hacia la derecha, por lo que el brasileño debería verse más las caras con el argentino.
"Blackenbauer" estaba suspendido en la ida, y va a extrañar a su compañero polaco el miércoles, ya que su complementariedad se había afinado esta temporada.
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El exjugador del Atlético Mineiro (24 años), que llegó en enero de 2016 al Principado, va a disputar uno de los partidos más importantes de su joven carrera.
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Sergio Agüero, en cambio, ya ha jugado partidos importantes, como la final del último Mundial, perdida por Argentina contra Alemania (1-0 tras prolongación).
Tras haber sido dejado de lado por Pep Guardiola en febrero para dejar explotar a la nueva sensación brasileña Gabriel Jesus, el "Kun" se está tomando la revancha de la mejor de las maneras.
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Desde la lesión del brasileño a mediados de febrero, el argentino marca, y mucho: seis goles en cinco partidos, entre ellos un doblete en la ida contra el Mónaco.
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Olvidadas las declaraciones de Guardiola que no quiso garantizar el futuro en el club de su goleador, Agüero se muestra de nuevo indispensable. Fue incluso capitán contra Stoke en el último partido contra el City (0-0).