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El Manchester United, liderado por el brasileño Casemiro, autor del primer gol y artífice del segundo, no dejó pasar la oportunidad y, a la primera, selló su clasificación para la Liga de Campeones, que queda fuera del alcance del Liverpool.
Solo un punto necesitaba el cuadro del neerlandés Erik Ten Hag en los dos partidos que le restaban para amarrar su objetivo. Consolidar un lugar entre los cuatro primeros de la Premier y regresar a la máxima competición continental.
En un partido loco, abierto, con ocasiones para ambos, salió vencedor ante el Chelsea, al que solo le importa maquillar su imagen en este tramo final. Sean como sean sus últimos encuentros, la campaña será lamentable para los 'blues', que terminarán en la mitad inferior de la tabla por primera vez en lo que va de siglo XXI.
Tuvo ocasiones el Chelsea para mantenerse en el duelo. Incluso para ponerse por delante. Pero por algo es uno de los peores equipos de la tabla en ataque. Solo el Wolverhampton, el Everton y el Southampton cuentan con menos goles que el cuadro de Lampard, que a los cinco minutos pudo ponerse con ventaja con un centro de Lewis Hall hacia Mykhailo Mudryk que éste remató fuera.
Sin embargo, el United no desperdició la primera ocasión que tuvo, un minuto después. Una falta lateral ejecutada por el danés Christian Eriksen fue rematada de cabeza con acierto por Casemiro, que desniveló el choque.
El encuentro se abrió. Anthony Martial pudo hacer el segundo, a pase de Antony, que cayó lesionado en el tobillo derecho por una entrada de Trevor Chalobah. Tuvo que ser sustituido el brasileño, retirado en camilla antes de la media hora.
Lewis Hall fue de lo mejor de los visitantes. El más desequilibrante del equipo londinense. Un buen centro suyo lo cabeceó, mal, Kai Havertz. Pudo ser el empate, que también tuvo Conor Gallagher en unos buenos momentos 'blues'.
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Pero fue el cuadro de Ten Hag el que amplió su ventaja y dejó casi sentenciado el choque en el tiempo añadido de la primera parte. Una estupenda asistencia, sin mirar, de Casemiro hacia Jadon Sancho, en el área, que envió la pelota a Anthony Martial que anotó a puerta vacía.
Terminó ese gol por frustrar al Chelsea antes del intermedio. Después, pudo ser mayor la ventaja por un disparo de Bruno Fernandes a la cruceta tras recibir un pase de Jadon Sancho. Y Kepa Arrizabalaga evitó, sobre la línea, un gol de Tyrell Malacia, que en el descanso sustituyó a Luke Shaw.
El gol del portugués llegó de penalti. Después de que fuera trabado en el área por Wesley Fofana. No lo celebró Bruno Fernandes, que selló el marcador.
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Entregado el Chelsea, el United se recreó. Bruno Fernandes asumió la dirección y el protagonismo y, en un error en la salida de balón de Wesley Fofana, se hizo con el esférico, que centró a Marcus Rashford para batir por cuarta vez a Kepa.
El meta español se salvó de encajar otro tanto, el quinto. Le alivió el larguero, que repelió un disparo del argentino Alejandro Garnacho.
Apareció Joao Felix para maquillar el marcador en un contraataque. Recibió un pase de Hakim Ziyech en el centro del campo. Y allí avanzó y desde la media luna ejecutó un tiro raso fuera del alcance de David de Gea.
Estaba desatado el duelo y el marcador pudo ser mayor. Para unos o para otros. Garnacho, Rashford, ambos pudieron anotar más y lo evitó la mejor versión de Kepa. Ya no se movió. El Chelsea cerró su penúltimo partido, el último como visitante, con una goleada. Acabará en Stamford Bridge, contra el Newcastle. El United, ahora tercero, finaliza también en Old Trafford, frente el Fulham.
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