Con una demostración de fútbol total, el París Saint-Germain se proclamó nuevo campeón de Europa tras golear 5-0 al Inter de Milán, que no encontró respuestas ante la superioridad del conjunto francés.
La final, disputada este sábado en Múnich, significó el primer título de Liga de Campeones en la historia del club parisino.
El dominio del PSG fue absoluto desde el inicio. Achraf Hakimi abrió el marcador en el minuto 12, Désiré Doué amplió la ventaja con un doblete (20' y 63'), mientras que Khvicha Kvaratskhelia (73') y Senny Mayulu (87'), recién ingresado, completaron la histórica goleada.
Pocas veces se ha visto una final tan desequilibrada. Nunca antes un equipo había ganado la Champions por una diferencia de cinco goles. El PSG registró 23 remates, ocho de ellos a puerta, frente a los siete disparos —solo dos al arco— del Inter.
Este triunfo rotundo representa también una reivindicación para el fútbol francés, que apenas suma dos títulos en ocho finales disputadas desde la creación del torneo hace siete décadas.
Una segunda Champions para Francia, 32 años después
El trofeo conquistado por el PSG se suma al del Olympique de Marsella, que ganó en 1993 también en Múnich. Sin embargo, el balance sigue siendo modesto: solo dos títulos europeos para equipos franceses, la misma cantidad que logró el Nottingham Forest en 1979 y 1980.
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La jornada en Múnich tuvo un ambiente festivo: cielo despejado, 30 grados, calles colmadas de aficionados, bañistas en el río y un concierto de Dua Lipa en paralelo a la final. En los hoteles, los jugadores aguardaban con paciencia, intentando alcanzar el equilibrio mental justo para encarar el partido.
El PSG encontró esa armonía desde el primer minuto, imponiendo un ritmo vertiginoso y un juego fluido que desarmó a la defensa italiana mediante la rotación constante de sus atacantes.
Así cayó el primer gol: Vitinha filtró un pase preciso para Doué, quien asistió a Hakimi para que anotara a puerta vacía frente a la afición interista. El marroquí pidió disculpas de inmediato a los hinchas, recordando su pasado en el club italiano.
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Superioridad incontestable
El Inter apenas reaccionaba cuando llegó el segundo golpe. El ecuatoriano Willian Pacho salvó un balón cerca de la línea de fondo y, con su despeje, inició una contra letal liderada por Ousmane Dembélé, quien encontró a Doué en la banda contraria.
El joven talento francés, de 19 años, remató con potencia y, tras un leve desvío en Federico Dimarco, venció a Yann Sommer.
Con un 2-0 en contra en apenas 20 minutos, el Inter se encontraba en un escenario muy distinto al que afrontó en las semifinales ante el Barcelona. El técnico Simone Inzaghi intentaba motivar a sus jugadores desde la banda, pero sus esfuerzos fueron en vano ante un rival en plena forma. Recién al minuto 75 logró su primer remate entre los tres palos. Mientras tanto, el PSG siguió generando peligro.
Kvaratskhelia rozó el gol en dos ocasiones al cierre del primer tiempo (45+2) y finalmente encontró recompensa a los 73 minutos, ampliando aún más la ventaja.
Doué, figura consagratoria
Antes del tanto del georgiano, Doué ya había firmado su doblete. Dembélé asistió con un taconazo a Vitinha, quien nuevamente habilitó al francés para el 4-0. Esta vez, Doué celebró quitándose la camiseta frente a la hinchada parisina.
La última anotación fue obra de Senny Mayulu, que apenas al ingresar al campo combinó con Barcola para sellar el 5-0 definitivo.
El trofeo, la emblemática ‘Orejona’, había sido colocada en el césped horas antes por los exjugadores Javier Zanetti y Javier Pastore. Finalmente, fue alzada por Marquinhos, el primer capitán en la historia del PSG en conquistar la cima del fútbol europeo. Una noche inolvidable para el club y para todo el fútbol francés.
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