Panamá logró esta semana un hito significativo en su política económica y diplomática: la salida oficial de la lista de jurisdicciones de alto riesgo para el blanqueo de capitales y financiamiento del terrorismo de la Unión Europea (UE). Según el ministro de Economía y Finanzas, Felipe Chapman, se trata de una victoria institucional que “ratifica a Panamá como un país cooperador, comprometido en la lucha contra el flagelo del blanqueo de capitales”.
El proceso, que tardó varios años y exigió profundos cambios legales y estructurales, permite ahora a Panamá mejorar su imagen internacional y facilitar el acceso a mercados financieros y comerciales, especialmente en Europa.
“La noticia es supremamente buena desde el ámbito internacional. Elimina un número importante de barreras comerciales, financieras y económicas entre la Unión Europea y Panamá”, destacó el ministro en entrevista con Blu Radio.
Costos reducidos y atracción de inversiones
La salida de la lista de alto riesgo se traduce de inmediato en beneficios tangibles para la economía panameña. Eliminar la etiqueta de “no cooperante” permitirá reducir costos en transacciones financieras y comerciales, y mejorar el flujo de inversiones extranjeras.
“Facilita desde las transferencias bancarias hasta el intercambio comercial, abaratando costos para importación y exportación, y permite que empresas de primer orden inviertan sin obstáculos”, explicó Chapman.
La medida cobra especial relevancia en momentos en que Panamá busca atraer nuevos capitales para proyectos clave como el Canal de Panamá y el sistema ferroviario nacional, donde se prevé una mayor participación de empresas europeas.
Reformas técnicas e institucionales: el camino hacia la salida
Salir de la lista no fue tarea sencilla. El país debió emprender una serie de reformas legales y técnicas para garantizar la trazabilidad de las operaciones económicas y combatir las prácticas ilícitas. Una de las principales transformaciones fue la creación de una superintendencia dedicada al sector no financiero, la cual regula actividades vulnerables al blanqueo, como la abogacía, el comercio de vehículos y la construcción.
“Panamá tuvo que adoptar una serie de legislaciones… Se crea una superintendencia para sujetos no financieros y se fortaleció la Unidad de Análisis Financiero (UAF), brazo clave en la lucha contra el lavado”, detalló el ministro.Además de las reformas técnicas, el país enfrentó una etapa de negociación política y diplomática ante el Parlamento Europeo, que fue descrita como “altamente compleja”.
Chapman destacó la intervención directa del presidente de la República, José Raúl Mulino, en gestiones con líderes europeos: “Fue un esfuerzo de equipo. Tuvimos reuniones con mandatarios, ministros de economía y líderes de organismos multilaterales. Sin ese compromiso presidencial, el resultado habría sido difícil de alcanzar”.
Fortalecimiento de las relaciones con Europa y EE.UU.
La exclusión de la lista negra europea también refuerza la relación entre Panamá y Estados Unidos, país que ha mantenido un lazo sólido de cooperación con la nación centroamericana en materia de seguridad financiera.
“La relación con EE.UU. ha sido estrecha por décadas. Esto confirma la posición estadounidense de ver a Panamá como un país cooperante”, comentó Chapman.
En cuanto a Europa, el ministro detalló que existen múltiples empresas de países como España, Alemania, Italia y Países Bajos con presencia significativa en el país. El nuevo estatus mejora las condiciones para que estas compañías amplíen sus operaciones o nuevas firmas europeas decidan invertir en sectores estratégicos del país.
Desafíos futuros: intercambio tributario y control marítimo
Pese a los avances, Panamá enfrenta aún desafíos en otros frentes regulatorios. Uno de ellos es el cumplimiento de los estándares de intercambio de información tributaria exigidos por el Foro Global de la OCDE, en el que el país “está bastante avanzado”, según Chapman.
Adicionalmente, se han tomado medidas frente a preocupaciones internacionales por el mal uso de la bandera panameña en actividades ilícitas marítimas. “Panamá ha retirado banderas a barcos implicados en pesca ilegal o comercio no autorizado de petróleo. Es un esfuerzo de limpieza voluntaria que también muestra responsabilidad internacional”, afirmó.