Gobierno suspende diálogo con camioneros por accidente de gobernador de Boyacá

Por el accidente del gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, el Gobierno nacional suspendió las negociaciones con las que se buscaban una salida al paro camionero. El secretario general de la Presidencia, Luis Guillermo Vélez, dijo que el Gobierno investiga si los manifestantes que atacaron a piedra la caravana en la que viajaba el mandatario se relacionan con el paro. “Hay versiones muy serias que indican que pudo haber tenido relación con actos vandálicos, aparentemente relacionados con la cruzada camionera. Hasta tanto no se verifiquen los detalles, se ha tomado la decisión de suspender las negociaciones”, manifestó el funcionario. Mientras tanto, la Defensoría del Pueblo condicionó su continuidad como mediadora en las conversaciones a dos hechos: a que cesen las vías de hecho por parte de los trasportadores y a que Pedro Aguilar, líder de los camioneros, rectifique su amenaza de dejar a Bogotá sin alimentos. El gobernador sufrió un aparatoso accidente de tránsito cuando se dirigía de Tunja a la ciudad de Duitama para atender una reunión con transportadores. El gobernador fue traslado a una clínica de Tunja y aún no hay un parte médico oficial sobre su salud. Este es el comunicado de la Defensroría: Ante las últimas circunstancias que han rodeado el desarrollo del paro camionero y los intentos de diálogo entre el Gobierno y los transportadores de carga por carretera, la Defensoría del Pueblo condicionó su continuidad como agente mediador en las conversaciones. El ente de control lamentó los graves hechos de violencia que han rodeado las manifestaciones de inconformidad del gremio transportador y advirtió que mientras persistan las vías de hecho, las posturas altisonantes y el cruce de declaraciones sin soluciones a la vista, se mantendrá al margen de las negociaciones. La Defensoría anunció que a través de sus equipos en terreno verificará la presunta relación entre la protesta y algunas situaciones particulares que han llegado incluso a comprometer la integridad de otras personas, e insistió en que circunstancias de esta naturaleza sumadas al estancamiento del diálogo productivo generan más tensiones y prolongan un acuerdo absolutamente necesario para el país luego de 35 días con graves afectaciones en más de 15 departamentos. El organismo humanitario, que desde un comienzo ha acompañado las discusiones y ha expresado su voluntad de ejercer como buen componedor para propiciar acercamientos y lograr un punto de encuentro definitivo entre las partes, considera que en medio del desabastecimiento que padecen algunas regiones, el alza en los productos de consumo diario, los ajustes y la escasez de combustibles en varios puntos, así como las restricciones a la movilidad en otros, no se justifica dilatar más la concertación. A juicio de la Defensoría del Pueblo, es momento de que tanto el Gobierno como los líderes del paro camionero actúen con sensatez y busquen sin más vacilaciones y de cara al país una salida inmediata y satisfactoria a este escenario, que con el paso de los días adquiere visos de crisis para millones de ciudadanos perjudicados por cuenta de la protesta. De todas maneras, y en ejercicio de su misión constitucional, la Defensoría mantendrá su dispositivo de acompañamiento en 26 regionales para asistir a los ciudadanos cuyos derechos sean vulnerados con ocasión del paro camionero y a las personas eventualmente detenidas, a la vez que estará atenta frente a un nuevo llamado de las partes, si así lo consideran necesario, en la medida en que se respeten los protocolos de entendimiento y haya garantías para solucionar esta difícil coyuntura.