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”Me quitaron una parte de mi corazón”, son las palabras de Marly Mosquera la madre de la pequeña Salomé, quien murió en medio de los enfrentamientos entre el Ejército y las disidencias en zona rural de La Plata, Huila.
La mujer narró cómo estaba en La Plata realizando trámites para el bautizo de su otro hijo cuando recibió una llamada de su hijo, quien le informó sobre un enfrentamiento en la zona y que se dirigía a casa de su abuela para resguardarse.
"Yo le dije que bueno, porque nuestra casa no tiene ventanas ni puertas", contó la madre, sin imaginar el trágico desenlace que se avecinaba.
Poco después, un vecino de la vereda se acercó a ella y le comunicó la terrible noticia: su hija había recibido un disparo. Confundida y desesperada, la madre se dirigió a su hogar.
"La niña venía todavía con signos, pero lastimosamente la ambulancia no podía llegar a tiempo", lamentó la madre. La falta de acceso y la situación en la vía complicaron aún más la llegada de la asistencia médica a tiempo.
La madre relató cómo su hija, a quien le gustaba cantar, bailar y jugar, había soñado con practicar baloncesto, pero su pasión era cantar.
La pérdida de la niña ha dejado un vacío insuperable en el corazón de esta madre, quien expresó su dolor y enfado por la forma en que ocurrió la tragedia.
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"El Ejército debió evacuar, debieron tener precaución y mirar si había gente en las casas de donde estaban disparando o donde estaban disparando los otros", dijo.
"Una parte de mi corazón se fue con ella", añadió entre lágrimas. La comunidad se une en el dolor y la indignación, exigiendo acciones que eviten que tragedias como esta vuelvan a repetirse en la región.
Aquí el testimonio de la madre:
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