Rocío Brochero, de 51 años, falleció en el momento del colapso de los palcos, mientras que Blanca Liliana Sandoval, de 63 años, Marco Fidel Hernández, de 52 años, y el bebé de 14 meses, fallecieron mientras recibían atención médica.
Además, otras 263 personas fueron remitidas a otros centros asistenciales debido a las heridas recibidas. También, la Fiscalía tiene un proceso activo.
Una de las tradiciones en la tierra de la Tambora es la realización de corridas de toros, y para tal fin, como todos los años, se instaló la plaza de toros y se abrió la cartelera para los amantes de la tauromaquia. Muchas familias asisten con sus hijos y abuelos para mantener la tradición, pero el año anterior terminó en tragedia.
Para este 17 de noviembre, el ente investigador anunció haber imputado cargos al presunto responsable del colapso de los palcos que terminó en tragedia.
“Por el homicidio culposo de cuatro personas, entre ellas un niño de 2 años de edad, la Fiscalía, a través de un despacho seccional del Espinal Tolima, le imputó cargos a Luis Ernesto García Aranda, constructor del palco que falló el año pasado en la plaza de toros del municipio durante las fiestas Sampedrinas, dejando igualmente más de 200 personas lesionadas”, dijo Ángela María Bedoya Vargas, directora seccional de fiscalías Tolima.
Luis Ernesto García Aranda, de 31 años de edad, fue enrostrado por el ente acusador por su presunta responsabilidad en el delito de homicidio culposo en concurso homogéneo y sucesivo de cuatro personas, entre ellos un niño de 2 años de edad.
Según la Fiscalía, los palcos colapsados fueron del 33 al 40, presentando falla en su estructura el número 35.
“Según la investigación, los palcos colapsados fueron del 33 al 40, presentando falla en su estructura el número 35, por ausencia de vigas o cables que ayudaran a conectarla y así distribuir de manera segura y equilibrada el peso. Según esto, el dictamen de los peritos en las inspecciones judiciales, el grupo de ingeniería y arquitectura de la seccional Tolima, acompañados por sus homólogos del nivel central, llegaron a la conclusión de que se presentó una afectación o falla en la guagua vertical interior del palco número 35 que generó un fenómeno de arrastre de los palcos vecinos, iniciando un efecto en cadena que derribó los palcos que lo acompañaban”, explicó Bedoya.
El delegado fiscal le imputó estos hechos al considerar que actuó con imprudencia y mala planeación, al evidenciarse falta de diseño estructural y arquitectónico en esta construcción.
“Además, el imputado habría sobrecargado el palco al permitir que se ubicaran más personas, superando el máximo de peso permitido para este tipo de construcciones”, puntualizó.
Luis Ernesto García Aranda no aceptó los cargos expuestos por el delegado fiscal y seguirá vinculado al proceso investigativo.
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