La imagen que Jesús Abad Colorado, el mejor fotógrafo de la guerra, no pudo tomar
“Muchas veces me ha tocado bajar la cámara”, confesó el reportero gráfico del conflicto más reputado del país.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
El fotógrafo Jesús Abad Colorado, cuyas imágenes sobre la guerra en Colombia le ha valido reconocimiento mundial, reveló estremecedores detalles de su trabajo en entrevista con BLU Radio.
“El nombre de mi padre es Héctor Colorado, él sí vivió la violencia y perdí a mis abuelos. Mi abuela se murió de pena moral por la muerte de mi abuelo y su hijo menor. Murió cuatro meses después del asesinato de mi abuelo”, contó el afamado reportero gráfico.
“Para ver la guerra y para ver el dolor no hay que mirar el orificio de la bala o el cuerpo mutilado, hay que mirar las lágrimas de los sobrevivientes y eso me ha permitido volver una y otra vez a muchos lugares”, declaró.
“Una noticia no es más importante que la vida de la gente. Cuando las personas a mí me piden que no registre algo lo he hecho”, relató.
Uno de estos momentos fue descrito por Jesús Abad colorado.
Publicidad
“Un día en el Cauca, en el año 2012, recuerdo que acompañé a unos líderes que fueron por la muerte de un médico tradicional de una comunidad, que se llamaba Lisandro Tenorio Trochez. Con esos líderes iba allí el hijo del líder”, declaró.
“Lo había matado la guerrilla de las Farc, así lo decía la gente alrededor. Lisandro, que vivía en una casa construida con caña brava, de piso en tierra, que estaba rodeado de puras bolsas llenas de hojas para hacer medicina tradicional. Su cuerpo estaba frente a la casa. Cuando yo llegué allí, recuerdo que a su hijo, que para mí debería ser un premio nacional de paz, Gerardo Tenorio, le dije que quería acompañarlos a ver lo que había pasado”, prosiguió.
Según el reportero gráfico, al llevar a la vivienda se encontraron con un cuerpo tendido y cubierto por una sábana.
Publicidad
“Yo respeté ese momento de intimidad. Vi a Gerardo Tenorio, arrodillado frente al cuerpo de un padre haciendo oración, haciendo medicina tradicional y pidiendo. No lanzand frases maldiciendo a los asesinos, sino a un líder indígena, hijo de un médico tradicional que estaba pidiendo.
Decía, padre, necesitamos la paz para el pueblo indígena, necesitamos la paz para el pueblo negro, necesitamos la paz para toda Colombia. Ese día, sin que yo hiciera esa fotografía, porque respeté ese momento de intimidad, entendí que mucha gente en Colombia me ha dado lo que es la bondad y la esperanza de un país que nos está diciendo que todos deberíamos estar poniendo un ladrillo para trabajar por la paz”, relató.
“Nuestros campesinos lo único que quieren es volver a vivir en paz”, declaró el fotógrafo más famoso del conflicto en Colombia sobre quien este jueves se estrena el documental ‘El testigo’, presentado por Caracol Televisión.