¡Rumbo al espacio! Estos experimentos del Atlántico fueron escogidos para ir a la NASA

Dos semillas nativas del Atlántico, de moringa y trupillo, viajarán por fuera del planeta tierra en proyectos adelantados por doce jóvenes de la Institución Educativa Niño Jesús de Praga, ubicada en Hibácharo, corregimiento de Piojó. Allí, en esta zona costera del departamento, ellos vienen trabajando desde el año 2018 en el programa Cubes in Space, una convocatoria internacional que busca que jóvenes entre los 11 y 18 años se motiven a hacer ciencia y envíen al espacio experimentos en pequeños cubos. Lea también: Colombiano busca desarrollar carro volador con apoyo de la Nasa El primer experimento fue seleccionado para viajar, a mediados de junio, en un cohete que saldrá desde las instalaciones de la NASA en Virginia, Estados Unidos. Según la estudiante Alejandra Bula, de noveno grado, su proyecto busca probar qué tanto resiste en el espacio el extracto de la semilla de moringa y si esta puede servir para purificar el agua que usen los astronautas durante los vuelos espaciales. "Este extracto se envasará en un cubo el cual viajará a la ionosfera que se encuentra de 80 a 120 kilometros de la tierra. Allá se expondrá a altas temperaturas y a radiaciones, así determinaremos si la estructrura química sufre alguna alteración y sino, el extractor se podrá utilizar para tratar el agua para próximas misiones espaciales", contó Bula. Lea también: La razón por la que la NASA canceló paseo espacial 100% femenino Los otros dos experimentos saldrán a mediados de septiembre, desde Nuevo México, a bordo de un globo científico. Estos, dice el estudiante Eimer Padilla, de undécimo grado, buscarán probar si la harina que se extrae de la semilla trupillo puede servir de alimento en los viajes espaciales y, por qué no, en futuras colonizaciones a otros planetas. Estos jóvenes trabajan de la mano de docentes de ciencias naturales y ya tienen formulados sus tres experimentos. Sin embargo, ahora no cuentan con los recursos para poder hacerlos llegar hasta la NASA. Según el profesor Luis Walteros, inicialmente se requieren unos dos millones de pesos para insumos y envío. "Nosotros somos una escuela a nivel rural y no contamos con un laboratorio, entonces se nos dificulta pedirle a los padres de familia que nos colaboren con eso", contó el docente. Estos proyectos, que buscan purificar el agua y proporcionar alimentos en el espacio, surgen de la misma necesidad que tienen estos estudiantes en su población, pues carecen de agua potable y, en ocasiones, escasea la comida cuando azota la sequía.

¡Rumbo al espacio! Estos experimentos del Atlántico fueron escogidos para ir a la NASA

Los experimentos seleccionados fueron creados por estudiantes de un colegio rural del Atlántico.

NASA